El Gobierno y el PP pactaron un real decreto que se aprobó el 26 de abril por el que se reforma la Casa del Rey, con medidas relativas a transparencia y rendición de cuentas, eficiencia en el servicio público y ejemplaridad. Un día antes, Felipe VI hizo público su patrimonio de 2,5 millones de euros sin propiedades inmobiliarias ni bienes en el extranjero.