El colectivo de trabajadores sujeto a legislación local de los centros del Instituto Cervantes en el exterior, tras reunirse en asamblea, ha acordado convocar una nueva huelga para el personal local, esta vez con una duración de 5 días del 23 al 27 de enero de 2023, según informa el sindicato CGT en un comunicado.
Tras más de 14 años de congelación salarial, movilizaciones y propuestas de negociación sin respuesta por parte de la Administración Pública ni del Instituto Cervantes, la huelga tiene como objetivo que el Instituto se avenga a una actualización salarial que subsane la enorme pérdida de poder adquisitivo sufrida por el colectivo. Los convocantes reclaman que La subida salarial debe ser, como mínimo, equivalente a la inflación acumulada y a la devaluación monetaria en cada país de destino durante el período 2009-2022. Señalan también que el Instituto Cervantes puede utilizar los recursos que tiene a su alcance, hacer una propuesta eficaz a la CECIR y resolver el tremendo agravio comparativo entre el personal de legislación local y el de legislación española.
También piden que se desarrolle un convenio colectivo que asegure la aplicación de incrementos salariales a todo el personal del Instituto, sin discriminar ni desamparar al personal sujeto a legislación local. Asimismo, la implementación de una escala de clasificación profesional para el establecimiento de funciones claras, atribuidas a cada puesto de trabajo, con retribuciones justas y adaptadas a cada uno de los países en los que está presente el Instituto Cervantes.
Otras peticiones son la retribución del 100% de las bajas por incapacidad laboral para que cese la discriminación del personal con legislación local y se recuperen las condiciones anteriores a 2012 de las que ya disfruta el resto del personal. También el acceso a los servicios sanitarios en las mismas condiciones que el personal con legislación española mediante la suscripción de seguros médicos, pagos de mutuas o cualquier otro mecanismo vigente en los diferentes países de destino. Y, por último, la posibilidad de hacer trabajo a distancia, tal y como recomienda el Gobierno en las políticas de ahorro energético y de conciliación de la vida personal y laboral.
Desde CGT animan a que el Instituto Cervantes ejerza su responsabilidad y se avenga al inicio inmediato de negociaciones que resuelvan esta situación de precariedad y eviten más días de huelga.
