La Semana Santa se cerró con cifras récord, tanto de ocupación hotelera como de precios, con llenos totales en las islas, las zonas costeras y en lugares más vinculados a las procesiones y una ocupación media en España del 90%. Todo ello, pese a un alza considerable de los precios de los billetes de avión, la gasolina o los alojamientos. Y con una facturación precovid, pues los indicadores son positivos para los hoteleros, con alzas de 19 puntos porcentuales en tarifa media sobre el 2019.