El Parlamento aprobó el 31 de julio la Lei de Patrimonio Natural para avanzar en la protección y conservación de la Galicia verde y azul. Consolidar la importancia de la protección medioambiental, fomentar los mecanismos de participación y la implicación social en esta materia y perseguir las agresiones contra el patrimonio natural con un nuevo régimen sancionador, más duro y que apuesta por la reposición del daño causado, son algunos de los objetivos principales de la norma.