Zapatero y Rajoy recuperan la unidad contra el terrorismo y acuerdan la renovación del Poder Judicial

Discrepan acerca de la forma para hacer frente a la crisis de la economía

Sin embargo, Zapatero y Rajoy no lograron ponerse de acuerdo respecto a las medidas para hacer frente a la crisis económica.
En la que fue la décima reunión si se tienen en cuenta las desarrolladas en la anterior legislatura, el presidente del Gobierno y el líder del Partido Popular mostraron su entendimiento para afrontar la lucha contra el terrorismo y abordar reformas legales en favor de sus víctimas. Además, se pusieron de acuerdo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Constitucional y en impulsar una serie de medidas para modernizar la administración de Justicia. Zapatero, en su comparecencia ante la prensa, hizo una valoración “positiva” del desarrollo y resultado de su reunión con Mariano Rajoy, en el sentido de que dio “acuerdos y frutos” beneficiosos para el funcionamiento de las instituciones democráticas y para los ciudadanos.
El acuerdo alcanzado en la lucha contra el terrorismo fue calificado por el presidente del Gobierno como “extraordinariamente importante”, porque le da “fortaleza y tranquilidad” para afrontar esta lucha. Se concreta el acuerdo en unidad de los demócratas y estrategia compartida; apoyo a las víctimas; confianza en el Estado de Derecho; reafirmación “solemne” de que nunca con la violencia se conseguirá ningún objetivo político; y cooperación internacional. Además, en este terreno, decidieron abordar conjuntamente reformas legales que se incluirán en la Ley de Víctimas del Terrorismo, y que instarán a todas las Administraciones públicas a adoptar medidas conducentes a la retirada de insignias, placas y menciones que exalten personal o colectivamente el terrorismo. También estudiarán reformas en las penas accesorias de los condenados por terrorismo para garantizar el “aseguramiento” de las víctimas cuando éstos salgan de la cárcel y para que satisfagan con su patrimonio sus responsabilidades civiles.
En cuanto a la Justicia, coincidieron, además, en la necesidad de abordar dos reformas legales como son las referidas a la creación de un registro de pederastas y al endurecimiento de las penas por delitos de abusos sexuales. Se modernizará la administración de Justicia con la puesta en marcha de la Oficina Judicial, la incorporación de nuevas tecnologías, el impulso a los juicios rápidos penales y civiles y la incorporación a la ley de la carta de derechos de los ciudadanos ante la administración de Justicia.
El punto discrepante entre Zapatero y Rajoy fue sobre la forma de atajar las dificultades económicas. El presidente del Gobierno le dijo al líder popular que se rige por tres claves, que son confianza en la fortaleza de la economía española; rigor en la gestión de las cuentas públicas y mantenimiento de las políticas sociales. Insisitió en que no es partidario de la restricción del gasto defendida por Rajoy porque afectaría a las salarios de los empleados públicos, a los pensionistas o al desarrollo de la Ley de Dependencia.
Por su parte, Mariano Rajoy señaló que es necesario adoptar medidas urgentes “porque creo que hay una crisis económica y el Gobierno cree que no”, señaló. Además, Rajoy defendió que se ponga en marcha un plan de austeridad en las Administraciones públicas. Entre las medidas concretas que planteó se encuentran la deducción en el IRPF para la adquisición de una vivienda y rebajar el veinte por ciento del Impuesto de Sociedades.


El presidente expone al resto de partidos los consensos

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero expone estos días al resto de partidos políticos con representación parlamentaria los acuerdos que alcanzó con Mariano Rajoy en la reunión celebrada en La Moncloa. El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, explicó que el presidente del Gobierno busca hacer partícipes de los acuerdos al resto de grupos, así como mostrarles la “voluntad de diálogo” en temas como la unidad en la lucha antiterrorista.