Del contingente español, formado por más de un millar de soldados, el jefe del Ejecutivo indicó que desarrollan una misión que “hace grande a España y a Naciones Unidas”. José Luis Rodríguez Zapatero visitó la Base Miguel de Cervantes, en la que trabajan unos setecientos efectivos del Ejército español.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se desplazó a Líbano junto al ministro de Defensa, José Antonio Alonso, para visitar a las tropas españolas destacadas en este país que forman parte de la Fuerza Interina de las Naciones Unidas (Finul) cuya misión es intentar consolidar la paz y la estabilidad social en la región. Según informó La Moncloa, Rodríguez Zapatero es el principal impulsor, junto a Jacques Chirac (ex presidente de Francia) y Romano Prodi (presidente del Consejo de Ministros italiano), de reforzar la misión en Líbano que, “cumpliendo la legalidad internacional y con el respaldo de Naciones Unidas”, busque la paz en la zona.
Fueron estos tres mismos mandatarios los que en la cumbre hispano-francesa celebrada en Girona en noviembre de 2006 propusieron un plan de paz para Oriente Medio que incluía el despliegue de tropas en Líbano con un marcado liderazgo de la Unión Europea.
La propuesta fue asumida inmediatamente por el Consejo Europeo y supuso un nuevo impulso a los esfuerzos internacionales por la paz en la zona. España Francia e Italia lideran desde entonces el despliegue internacional en Líbano en el que también participan países como Alemania, Bélgica, Finlandia, Portugal, Polonia, China o Corea.
Con este viaje, el presidente del Gobierno cumple su deseo de visitar al contingente español de Líbano. La visita a las tropas viene precedida de la que el Rey Don Juan Carlos, de acuerdo con el propio presidente español, realizó el pasado 31 de diciembre a las tropas españolas destacadas en Afganistán. Rodríguez Zapatero ya había hecho un viaje similar en diciembre de 2005.
El Gobierno subraya que la misión libanesa responde escrupulosamente a los principios de política exterior defendidos por Rodríguez Zapatero desde que asumió la Presidencia del Gobierno y que están basados en la defensa de la paz, la legalidad internacional y el multilateralismo. Desde el desembarco de las tropas españolas en la playa de Tiro el 13 de septiembre de 2006, y tras varios relevos de efectivos, España elevó su aportación hasta los 1.100 efectivos y ejerce el mando de la brigada multinacional en la zona de influencia asignada por la resolución de Naciones Unidas.
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Primera misión al exterior con el apoyo total del Congreso
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La labor de los legionarios españoles cuenta con el respaldo de la comunidad internacional y fue reconocida y respaldada con la concesión de la medalla de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano. El envío de soldados españoles a este país sentó un precedente en la historia constitucional española al ser la primera vez que el Congreso de los Diputados aprobó sin votos en contra el envío de fuerzas a una misión en el exterior.
Ademas, Naciones Unidas aceptó la propuesta española de instalar una nueva Base de Operaciones para el Mantenimiento de la Paz (Domp) en la localidad valenciana de Quart de Poblet. Esta nueva base, que reforzará las misiones de paz de la ONU en el Mediterráneo y África, cuenta con una aportación española de 20 millones de dólares y generará 150 empleos directos y 1.200 empleos indirectos. Ofrecerá comunicaciones seguras e independientes a cerca de 100.000 civiles y militares que participan en misiones de paz.