En respuesta a una pregunta de los periodistas sobre las pensiones, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha insistido en la necesidad de congelar las pensiones en 2011, pero ha aclarado que si en noviembre la inflación es superior al 1% previsto, los pensionistas cobrarán en enero, como hasta ahora, una paga correspondiente a la desviación del Índice de Precios al Consumo (IPC), pues la congelación es para el año 2012.
Además, ha pedido al PP que se comprometa responsablemente con los recortes anunciados y se ha mostrado dispuesto a dialogar con ese partido, con las comunidades autónomas y con todos los grupos parlamentarios sobre los ajustes anunciados por el Gobierno, pues el diálogo, a su juicio, es «imprescindible».
La congelación de las pensiones excluye a las más bajas y a las no contributivas.