Ya son tres los españoles en una huelga de hambre en Caracas por la ocupación de sus tierras

A los hermanos Solórzano, que se han situado a las puertas del Consulado español, se las ha unido el almeriense Antonio Agüera

Los hermanos Solórzano a las puertas del Consulado de España en Caracas dieron a conocer su manifiesto.
Los hermanos Solórzano en la entrada del Consulado de España en Caracas.

El mismo viernes día 8 pareció que llegaría a su fin la huelga después que las autoridades del Instituto Nacional de Tierras acudieron hasta el Consulado a dialogar con los afectados. En presencia del cónsul, Aníbal J. Jiménez Abascal, se acordó una reunión en horas de la tarde entre el padre de los huelguistas, José Solórzano Calderón, y el ministro de Agricultura y Tierras, Juan Carlos Loyo, pero ese encuentro no aportó ningún resultado. Loyo informó que el presidente Hugo Chávez autoriza el pago de la indemnización de los únicos 9 casos de expropiación que reconoce el gobierno venezolano, pero el dinero “no ha bajado”.
José Solórzano Calderón, de 84 años, viudo de la madre canaria de sus nueve hijos, adquirió en 1965 las 33.000 hectáreas del Hato La Vaca, finca agropecuaria situada en Calabozo, estado Guarico, donde cada hijo sostenía una unidad de producción. Informa la familia que en 2005 la propiedad fue tomada de forma violenta por efectivos militares y repartidas pequeñas parcelas a campesinos, que recibieron créditos y maquinaria para trabajar la tierra. “Pero hoy esos campesinos, después de arrasar con todo dejaron abandonado el lugar”, explican.
El cónsul se ha ocupado de ofrecer protección a los huelguistas, dada la alta inseguridad que caracteriza a la ciudad de Caracas y que ellos se mantienen al aire libre. Personal paramédico de la Alcaldía de Chacao comprueba diariamente el estado de salud de los, ahora tres, reclamantes. Estos son los únicos apoyos oficiales que han recibido, además de las visitas del presidente de la Federación de Centros Españoles de Venezuela, Félix Barbero, y de Antonio Álamo Lima, en representación del Consejo de Residentes Españoles (CRE) en Venezuela.
“Esta huelga es por nuestros derechos y nuestra dignidad. No podemos aceptar que se sigan burlando de nosotros. Consideramos una falta de respeto que desde el 2008 no se nos haya cancelado  lo que ellos quisieron acordar, muy por debajo de un precio justo, y todavía se nos pida que sigamos esperando”, declararon los Solórzano al momento de ratificar que no abandonaran su protesta hasta recibir el pago de lo que se les adeuda.