Acudieron la Fallera Mayor, Rosarín Puig Lanas, el abanderado, Gabriel Puig Frutos portando la enseña española y el presidente de la Colectividad Valenciana, Vicente Lisarde, acompañando a la Fallera Mayor en el momento de llevar las ofrendas y también en una petición por los migrantes, para que sean reconocidos en sus derechos y valores, acogidos y ayudados y puedan integrarse humanamente en los distintos países en los que están en diáspora.
Todo muy vistoso
Hubo representaciones de Brasil, Colombia, Ecuador, Paraguay, Chile, Cuba, México, Haití, Bolivia, República Dominicana, Argentina, Perú, Nicaragua, Venezuela, El Salvador, Guatemala, China Corea, Japón, Italia, Francia, y España.
Resultó todo muy vistoso e importante para las distintas representaciones, todo presidido por el presidente del Instituto Católico Chileno de migración (Incami) Monseñor Enrique Troncoso, obispo emérito de Melipilla, con bastantes sacerdotes dedicados a este menester, entre ellos un sacerdote coreano.
A este acto acudieron los miembros de la Colectividad Valenciana porque los emigrantes están integrados en la Parroquia Ntra. Sra. de Pompeya (parroquia italiana) que se encuentra muy cerca del casal de la colectividad, donde celebran algunas fiestas religiosas, ya que el hogar español donde está La Virgen de los Desamparados, queda lejos en la ciudad.
Al día siguiente, el domingo 7 de julio, la Colectividad Valenciana celebró su paella mensual.
El presidente de la Colectividad, Vicente Lisarde, señaló a España Exterior que “realmente es mucho el trabajo a realizar pues aparece mucha gente, sobre todo jóvenes valencianos venidos a trabajar a este país, y que esperamos se hagan socios de esta su casa, y que vean nuestro cariño en ellos por estar tan alejados de sus familias”.
“Nosotros somos su familia en este lejano país y ojalá muchos se enteren de nuestra presencia aquí. Hacemos un llamamiento a todos y lo decimos en el Consulado y otros estamentos para cuando vayan a algún trámite les indique que estamos aquí”, añadió.
Al igual que el mes anterior la paella se llenó de socios. En una mesa que había bastantes jóvenes valencianos naturales de Elche, Alicante, Castalla, e incluso una granadina.
Luego se guardó un minuto de silencio por el reciente fallecimiento del padre de Vicente Lisarde tras el cual el propio presidente de la colectividad se dirigió a los asistentes y habló sobre la misa que se había celebrado el día anterior y que TVN (televisión nacional) la emitiría el 1 de septiembre por el Día del Migrante. Habló un poco sobre la migración y lo que significa en nuestro casal y en nuestras vidas, pues una mayoría somos migrantes o hijos de migrantes. También avisó que en agosto vamos a hacer un pulmay (curanto en olla), comida típica del sur de Chile.
Luego se escucharon los himnos de Chile, España, y el de la Comunidad Valenciana.