Una España sublime vence a Alemania y jugará la final del Mundial contra Holanda

Puyol logró el único gol del partido con un soberbio cabezazo

Puyol celebra con sus compañeros el gol del triunfo ante Alemania.

Y, paradójicamente, fue un central, Puyol, de cabeza tras un córner, quien logró el gol de la victoria que mete a España por primera vez en su historia en la final de un Mundial. El domingo 11 de julio a las 20.30 (hora española) Holanda nos espera en Johannesburgo.

La sorpresa del partido fue la salida de Pedro en el once inicial en sustitución de Torres, que se quedaba en el banquilo. Del Bosuqe prefirió meter a cinco ‘peloteros’ en el medio del campo y dejar a Villa en punta como único delantero. La jugada le salió perfecta. Pedro hizo un trabajo extraordinario, no solo incomodando a la defensa metiéndose entre líneas sino también presionando la salida del balón y obligando a los alemanes a rifarlo.

España salió, como se dice, enchufada desde el minuto 1. Todas las líneas trabajaban con un coordinación perfecta y la posesión del balón se decantó claramente de nuestro lado. El toque, constante, sin pausa, delicado, estético y eficaz mandó en los noventa minutos. Aunque las ocasiones claras fueron pocas. Quizás demasiado pocas para el juego desarrollado por la Selección. Así, los primeros 45 minutos finalizaron con empate sin goles, pocas ocasiones y con los alemanes no excesivamente preocupados ya que España no había llegado con claridad a su portería.

Sin embargo, nada más empezar la segunda parte, España metió una marcha más. Se sucedieron las ocasiones con tiros lejanos de Xabi Alonso, Pedro, entradas en el área de Iniesta y jugadas muy peligrosas de Sergio Ramos desde el lateral. Alemania también dispuso de alguna ocasión, la más clara la de Kroos, que resolvió Casillas con una parada de número uno.

Cuando comenzaba a elevarse el nivel de juego, cuando empezaba a mascarse el gol español, apareció Puyol. Y lo hizo de forma inesperada. Xavi lanzó un córner al centro del área y el central del Barcelona, que entraba en carrera desde la frontal, saltó como un jabato y remató desde casi el punto de penalti al fondo de la red. Un gol que ya forma parte de la historia de nuestro fútbol. Un gol en el que se funden el toque y la furia. Un gol que emcionó sobremanera a los más de cuarenta millones de españoles que viven en la Península y a los cientos de miles desperdigados por todo el mundo.

De ahí al final, aún quedaban quince minutos, España sufrió por los constantes centros al área de los alemanes. Pero también tuvo varias ocasiones clarísimas para finiquitar el encuentro al contrataque, especialmente de Pedro y Villa.

Casi en el minuto 94 el colegiado pitó el final y la felicidad se desbordó en la Selección y en todo el país.