Un miembro de la Casa Argentina de Baleares, Eduardo Corvalán, declaró en relación a la presunta trama de Unió Mallorquina (UM) para captar votos entre los inmigrantes de las Islas en las pasadas elecciones autonómicas. Corvalán prestó testimonio en la Dirección Superior de Policía en el marco de las diligencias informativas abiertas por la Fiscalía y aseguró que esta formación usó a inmigrantes argentinos para su provecho electoral y que les ofreció una contraprestación económica y laboral. Al igual que otros testigos, Corvalán apuntó al ex director insular de Relacions Institucionals, Josep Lliteres, y señaló que sería el jefe de esta presunta trama corrupta.Por su parte, el presidente de Unió Mallorquina, Josep Melià, aunque rechazó las prácticas clientelares en los partidos políticos, quiso restar importancia a la presunta trama de compra de votos al señalar que todos los partidos políticos las llevan a cabo con determinados colectivos, entre ellos el inmigrante.
Pese a esta afirmación, rechazó “de forma categórica y muy clara todas las prácticas clientelares”.En cuanto al señalado ex director insular Josep Lliteres, el presidente de UM quiso subrayar que de momento no está imputado ni existe ninguna medida cautelar sobre él, razón por la que la formación no tomó ninguna decisión respecto a él.