LA ENTREVISTA

“Somos 15 consejeros que velamos por la situación de cerca de 200.000 españoles en un momento de crisis tremenda para España”

María Teresa Michelón, presidenta del Consejo de Residentes Españoles de Buenos Aires

La presidenta del CRE de Buenos Aires, María Teresa Michelón.

Michleón explicó además cuáles son las inquietudes y necesidades más importantes que aquejan en la actualidad a la colectividad entre las que destacan la ‘pesificación’ de las pensiones, el acceso a la nacionalidad y el voto rogado.

-Usted preside el CRE de la demarcación consular que acoge a la mayor cantidad de ciudadanos españoles residentes en el exterior: ¿Cómo valora el trabajo realizado a lo largo de su existencia y en qué circunstancias se están afrontando los nuevos retos que se presentan?

-Desde que se fundó hace más de 23 años, este Consejo de Residentes Españoles ha logrado muchas conquistas gracias al excelente trabajo y al esfuerzo permanente que han hecho todos sus integrantes. Hoy somos 15 consejeros que velamos por la situación de cerca de 200 mil españoles en un momento de crisis tremenda para España y que indudablemente también afecta nuestro funcionamiento, ya que en los últimos años ha ido disminuyendo el presupuesto con el que contamos para desempeñarnos; en 2012 la baja fue de un 40 por ciento y este año de un 60 por ciento. Uno tiene que ser consciente de esta situación y tratar de economizar los gastos, y estamos siendo sumamente recatados en ese sentido porque comprendemos que España está pasando un momento muy difícil.

-¿Cómo afecta específicamente la crisis al funcionamiento del CRE?

-Debido a que abarcamos un territorio muy grande y a que muchos de los consejeros tienen que venir a la capital desde ciudades lejanas como Mar del Plata o Bahía Blanca, hemos decidido que las reuniones del Consejo se hagan una sola vez por mes porque se les dificulta mucha afrontar el costo de los pasajes y nosotros tampoco podemos trasladarnos para hablar con la gente del interior de nuestra demarcación, pero por suerte el correo electrónico facilita la comunicación entre todos.

También tuvimos que recortar los gastos en elementos de trabajo como agendas y lapiceras, tratando de ahorrar en todo lo que podamos porque enfrentamos una economía de guerra. De todas maneras, seguimos atendiendo a la gente personalmente dos veces por semana en la oficina que nos facilita el Centro Galicia de manera gratuita.

-¿Es fluida la relación con las instituciones de la colectividad?

-A veces no tanto como desearíamos, ya que muchas instituciones abren los correos electrónicos a los diez o quince días desde que se los enviamos y la información que les transmitimos ya ha quedado vieja. También es complicado comunicarse con ellos telefónicamente porque hay comisiones directivas que se reúnen una vez por semana o cada quince días y en horarios complicados. A pesar de ello, nunca dejamos de informarles y ayudarles en todo lo que necesiten, pero uno quisiera que la comunicación fuera más fluida.

-¿Cuáles son las preocupaciones más importantes para la colectividad?

-Uno de los temas en el que seguimos luchando mucho es el de la transmisión de la nacionalidad española, porque muchos nietos han quedado fuera de los alcances de la Ley de Memoria Histórica.

También continuamos trabajando en el reclamo para la eliminación del sistema de voto rogado en elecciones y que se vuelva al que se utilizaba antes de la última reforma a la Ley Electoral, aunque no tenemos la certeza de que vaya a ser así porque no estamos teniendo la respuesta que esperamos de las autoridades españolas. Es una cuestión que lamentamos mucho porque la gente está muy desilusionada y se siente abandonada y que le han sacado parte de su identidad.

Otra cuestión que los tiene muy preocupados, especialmente a las personas mayores más vulnerables, es la pesificación de las pensiones; ya hemos recibido seis mil denuncias que hemos entregado a la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, con quienes nos comunicamos dos veces por semana, pero es algo muy difícil de revertir porque es una ley impulsada por el Gobierno argentino y los jueces a los que se han elevado estas denuncias se están declarando incompetentes en la materia.

Es una pena porque España, que es el único país que paga pensiones asistenciales, está haciendo un gran sacrificio y el cambio oficial que los emigrantes perciben por estas remuneraciones los perjudica mucho ya que hay una inflación muy alta.

-¿Por qué la participación de la colectividad en las elecciones para elegir a los miembros del CRE siempre es muy baja?

-No se debe a que la gente no quiera participar, sino que no se entera de su realización ya que con el presupuesto con el que contamos no podemos hacer la difusión necesaria para mandarle información a tantas personas ni poner esos recursos a costa de nuestros bolsillos porque los consejeros ya están haciendo demasiados esfuerzos y trabajan ‘ad honorem’.

-¿Cómo ve el futuro del Consejo de Residentes Españoles ante este panorama?

-No me atrevería a dar un diagnóstico, pero si España se recupera seguramente también lo harán los recursos disponibles para los presupuestos destinados a los Consejos de Residentes Españoles. Lo importante es la voluntad que tienen todos los consejeros de seguir trabajando, y creo que eso ya vale mucho.