Secuestran a un emigrante gallego en el barrio caraqueño de Altamira

Juan Cortés, originario del municipio coruñés de Cambre, fue retenido en las inmediaciones de su restaurante, Casa Cortés

El empresario Juan Cortés, originario del municipio coruñés de Camba y residente en Caracas, permanece secuestrado desde el pasado sábado 14 de enero cuando fue retenido en las inmediaciones de su restaurante Casa Cortés en el barrio de Altamira, uno de los más lujosos de la capital venezolana.

Los secuestradores permitieron que Cortés, padre de dos hijas, estableciera contacto el martes 17 de enero con su esposa a quien le dijo que se encontraba bien y apeló a la discreción. Que se sepa los secuestradores todavía no han fijado la cantidad a pagar. Su hermando, Antonio Cortés, confirmó que el secuestro se produjo el sábado día 14.

La familia Cortés mantiene las reservas sobre los detalles del secuestro y de hecho no han denunciado en el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) que es además es una exigencia del grupo de plagiarios, según indican algunos medios venezolanos.

“En cuanto menos hablemos es mejor”, dijo el hermano del cautivo.

Antonio Cortés ha expresado su confianza en que “todo saldrá bien”. Cortés fue secuestrado por dos hombres que lo sometieron y lo introdujeron en una camioneta. Este vehículo estaba custodiado por dos motos. José Peña Pérez, primo de Cortés, manifestó que con anterioridad la Casa Cortés había sido objeto de un asalto, reseñó la agencia Efe.

Cortés, su esposa, que también es de origen gallego, y una de sus hijas residen en esa urbanización. Su otra hija estudia en Barcelona, España. El empresario llegó a Venezuela en 1965 y antes vivió un año en Francia.

El Ministerio de Asuntos Exteriores prosigue “sin novedad”, por el momento, las gestiones oportunas para que se resuelva el secuestro. Según han señalado fuentes diplomáticas a Europa Press, las gestiones están siendo coordinadas por el ministro del ramo y la Dirección General de Asuntos Consulares. Así, Exteriores se mantiene en contacto con la Embajada de España en Caracas y con las autoridades locales

El Consulado de España recibió el año pasado alrededor de una veintena de denuncias de secuestros de españoles en Venezuela, aunque el número real de este tipo de delitos es mayor dado que una gran cantidad de casos nunca se llegan a denunciar.

Venezuela tiene una de las tasas de criminalidad más altas de la región y hasta 2010 los niveles de asesinatos se situaban en 48 por cada 100.000 habitantes.