Rodríguez Miranda constata en Montevideo la voluntad clara de las doce entidades gallegas por llegar a la unión

El secretario xeral da Emigración se reunió con los directivos de las instituciones

Reunión con directivos del Patronato da Cultura Galega.
El secretario da Emigración entregando la 'Compostela' a una de las participantes en el programa 'Conecta Galicia'.
Charlando con los niños de la Escuela Galicia.
El secretario da Emigración entregó una donación de libros infantiles gallegos a la Escuela Galicia.
En el Centro Ourensán de la capital uruguaya.
Rodríguez Miranda con directivos y jóvenes de los campamentos con sus 'Compostelanas'.

Con una apretada agenda el Secretario Xeral da Emigración visitó Montevideo por poco más de doce horas para alentar el proceso de unión que doce de las trece instituciones gallegas de la capital uruguaya han iniciado, así como también para entregar la ‘Compostelana’ a 37 jóvenes que participaron este año del programa Conecta Galicia.

Uno de los actos centrales fue el almuerzo privado con los presidentes de las doce instituciones gallegas que han firmado la declaración de unión y que permitió reconocer en forma oficial y sin intermediarios cómo se encuentra este proceso.

Consultado por España Exterior acerca de si las instituciones de Uruguay están dispuestas a unirse, afirmó que “en éste último año he visto un cambio cualitativo importante. Hay un compromiso firmado por todas ellas, no requerido por la Administración sino entregado en la Comisión Delegada del Consello de Comunidades Galegas, fue entregada al presidente de la Xunta, y ahí se manifiesta una por una su interés en trabajar por ese proceso”.

Aseguró que “queda definir la forma de hacerlo, de hasta dónde queremos llegar o qué forma definitiva le queremos dar, pero lo que no me cabe duda hasta este momento es que hay una voluntad clara por parte de las entidades de Uruguay de llevar a cabo ese camino de trabajo en conjunto y de la unión”.

Adelantó que “bien se concrete en una única institución, en dos o tres por especialización o distribución, pero lo que sí está claro es que hay esa voluntad y se están poniendo los medios para ellos».

«El siguiente paso, los medios que nos quedarían después de este encuentro, es crear ya esa comisión de trabajo y pasar de las musas al teatro, poner cosas perfectamente definidas para que en un plazo corto podamos ver unos resultados que yo estoy seguro que sí los vamos a ver y, por lo tanto, tengo que agradecer este trabajo que se está haciendo desde la propia Federación (Unión de Sociedades Gallegas) como mecanismo y órgano de unión de todas las entidades del Uruguay”.

En la Escuela Galicia

La visita a la colectividad gallega de Montevideo del Secretario Xeral da Emigración de la Xunta de Galicia, Antonio Rodríguez Miranda, comenzó en la actual Escuela Galicia, perteneciente al estado uruguayo y que fue el primer centro escolar público en recibir de nombre una provincia española en 1962.

Es que en aquel momento fueron algunos integrantes de la colectividad gallega como Antón Crestar Faraldo, Marcelino Martínez Gómez y hasta un ex alumno de ésta escuela, José Rosendo Fernández Seivane ‘Pepe Fernández’, quienes colaboraron en reacondicionar el centro escolar al que dejaron en condiciones de poder albergar las clases que se dictaban en forma laica y gratuita por la enseñanza pública uruguaya.

Luego sería el Ministerio de Educación uruguayo quien cesó la escuela para que allí funcionara un liceo, que no llevó el nombre de Galicia. Recién en 1998 nuevamente el estado uruguayo vuelve a designar Escuela Galicia a la número 163 de tiempo completo.

Entre el Centro Gallego, el Patronato da Cultura Galega y en los últimos tiempos el Centro Pontevedrés, se ha acercado la identidad gallega a este centro escolar que alberga a casi 180 niños de entre 6 y 11 años que asisten a todo el ciclo de enseñanza primaria y que provienen de hogares de bajos recursos y en muchos casos de pobreza extrema, por lo que la alimentación que se les brinda allí de 8.30 a 16 horas, en algunos casos es la única que reciben en todo el día.

A aquellos benefactores gallegos que hemos nombrado, debemos sumarle en los últimos años a Angel Domínguez, actual presidente del Hogar Español de ancianos, quien acondicionó de su peculio los baños de la institución, a lo que en este año continuó la obra del Ministerio de Desarrollo Social con mano de obra de adultos que son asistidos económicamente por el gobierno y que acondicionaron la escuela para que hoy la directora la presentara con orgullo ante los visitantes.

Pues a ésta escuela ubicada en el barrio del Prado, zona residencial del oeste montevideano, fue su primer punto de encuentro con la colectividad gallega del secretario xeral da Emigración. Allí le esperaban el presidente del Centro Gallego, Jorge Torres, del Hogar Español, Angel Domínguez, el presidente del CRE, Andrés Fernández, y el secretario del Centro Pontevedrés, Eduardo Alonso.

Acompañado por el Delegado de la Xunta de Galicia en Montevideo, Manuel Barros, Rodríguez Miranda mantuvo una entrevista con la Maestra Directora, Blanca Frugone, quien le explicó que están procurando aportar la identidad gallega a la escuela para que tanto alumnos como padres puedan identificarse con ella.

Así fue como recibió con gran entusiasmo los regalos que trajo el jerarca con láminas de paisajes gallegos y libros infantiles que de ahora en más estarán al alcance de los niños uruguayos.

Luego recorrió los salones donde se estaban desarrollando las clases y se llevó una grata sorpresa al encontrar al grupo de segundo año, que habían hecho un trabajo sobre Galicia, que le conocían y hasta se atrevieron a preguntarle en gallego como se llamaba.

Miranda señaló a España Exterior que “fue sorprendente y emotivo porque el hecho de que la presencia de Galicia en Uruguay lleva tantos años, de manera que la Galicia que hoy tenemos es el resultado de la Galicia en el exterior en todas las naciones del mundo. Eso ha ido modelando nuestra Galicia actual junto con el trabajo de la Galicia territorial, y de la misma forma los gallegos en las sociedades a las que hemos llegado, hemos llegado para quedarnos y participar para que el país en el que nos situábamos prosperase”.

Reflexionó que debido a esta impronta, “no hayamos hecho una vida al margen de las sociedades a donde llegamos, y que haya instituciones como ésta, una escuela pública de Uruguay donde los niños tienen interés y entusiasmo por conocer Galicia, por conocer cosas de Galicia aún no teniendo vinculación con Galicia».

«Evidentemente eso es debido a la gente que aquí está desde tantos años y que ha sabido transmitir a la sociedad uruguaya ese cariño que ellos han traído desde su tierra. Por lo tanto desde las instituciones se está colaborando con ésta escuela y desde la Xunta nosotros vamos a empujar también y ayudar a multiplicar ese trabajo de las instituciones para que éstos niños que tienen efectivamente dificultades económicas porque son de familias con menos capacidades, desde luego sientan a Galicia y cuando escuchen la palabra Galicia se les produzca en su cara una amplia sonrisa”, remató».

Encuentro con la colectividad

Luego de despedirse de la escuela Galicia, tras mantener encuentros con sus alumnos y maestras, Rodríguez Miranda se reunió en el Hogar Español de ancianos con su directiva y posteriormente con el Consejo de Residentes Españoles, para continuar por la tarde en su primer visita al Centro Ourensán que preside Xurxo Vázquez y al Padroado da Cultura Galega donde el vicepresidente Nelson Regueiro junto a los demás integrantes de la directiva le dio la bienvenida y agradeció los libros de obsequio que le llevó el secretario y que inmediatamente serán puestos a disposición de los socios en la biblioteca.

La actividad continuaría luego en Casa de Galicia donde 37 jóvenes descendientes de gallegos que participaron este año del programa Conecta Galicia, recibieron de su mano el pergamino “compostelano” que acredita el recorrido del Camino de Santiago durante una semana así como también el pasaporte del peregrino que habían ido sellando en cada una de las estaciones que realizaban.

En tanto el final de su visita estuvo en la mutua La Española, una de las instituciones médicas más grandes del Uruguay.

Ayudas a los más necesitados

Rodríguez Miranda también habló sobre su visita al Hogar Español que calificó de institución “modelo a nivel mundial”, expresando que “la Secretaría en este momento tiene la preocupación de que todos los mayores tengan la atención debida en el momento en que se produce la mayor desprotección que es cuando se deja de trabajar, se deja de generar recursos y se está supeditado a una pensión muchas veces escasa y por lo tanto de ahí el compromiso primero de nuestra Secretaría es con las personas”.

Aseguró que “hemos blindado las ayudas de carácter individual para que, a pesar de la restricción que tenemos, de la reducción en cuanto a la capacidad económica que hay en Galicia que es menor, que ese apartado sea intocable, que no haya menos dinero en el 2013 del que hubo en el 2012 y que en el 2014 no vaya a haber menos dinero que este año sino, en lo posible, un poquito más».

«Y a las entidades que trabajan con los mayores, para ellas máxima prioridad dentro del conjunto de las entidades, porque, insisto, es donde hay mayor desprotección, pero también queremos que nuestras instituciones se impliquen en este trabajo”, asegurando que para ello “queremos que nuestras instituciones sean grandes y fuertes, porque si son grandes y fuertes. y eso se consigue solamente fruto de la unión, podemos ofrecer actividades lúdicas, culturales, de divulgación de nuestra lengua, de nuestra cultura, pero también podremos ofrecer ese apoyo necesario para nuestros mayores o para nuestros compañeros de camino, los gallegos más desfavorecidos».

«La Xunta estará ahí, para ayudar, Galicia estará ahí, ese es un objetivo fundamental de nuestro presidente que tiene un compromiso absoluto con la Galicia exterior, pero también es necesario que las instituciones participen en este camino”, remarcó.

Apuesta por los jóvenes

Finalmente habló de la importancia de la “apuesta por los jóvenes que es fundamental en esta etapa que estamos viviendo de la Galicia exterior”, donde la media de edad tanto de quienes están en los puestos de dirección como en las bases asociativas es muy elevada, y “es necesario bajar esa edad incorporando personas jóvenes a la dirección que nos den los parámetros de lo que demandan los jóvenes y que las instituciones puedan realizar actividades que sean válidas para una persona de 90 años como para un niño de cinco o seis años que son los que debemos atraer” para realizar esa renovación.