Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy se reúnen el próximo día 22 en La Moncloa

No se entrevistan desde el pasado 28 de marzo

La última vez que se entrevistó con el líder de la oposición fue el pasado 28 de marzo, días después de que ETA declarara el alto el fuego.
Aunque la nota de Presidencia no especifica los temas que se tratarán en el encuentro, ambos dirigentes podrán abordar la marcha del proceso para el final del terrorismo, así como otros asuntos de actualidad, entre ellos la propuesta para la reforma constitucional planteada recientemente por Rajoy.
Desde Nueva York, el jefe del Ejecutivo explicó que la reunión con Rajoy se enmarca dentro de la normalidad y responde a su intención de mantener, al menos, un encuentro con el líder de la oposición cada semestre. Zapatero afirmó asimismo que la agenda de la cita está abierta, pero confirmó que prevé hablar de “cuestiones fundamentales del país” como algunas reformas legales y el proceso de paz.
La relación entre Zapatero y Rajoy pasa por un momento de especial distancia debido a sus diferencias en diversos temas, pero sobre todo por el proceso de diálogo con ETA. La imagen del presidente del Gobierno acercándose al líder del PP en un receso en el Congreso para darle el pésame por la muerte de la ex ministra Loyola de Palacio, un gesto anecdótico en otras circunstancias, fue reproducido con gran interés por los medios dado el especial nivel de enfrentamiento que hay entre ambos. La reunión será la sexta que mantengan desde que comenzó esta legislatura en marzo de 2004.


La ley de memoria histórica sigue su trámite al rachazarse tres enmiendas

El Congreso rechazó las dos enmiendas de totalidad con texto alternativo presentadas por IU-ICV y ERC, así como la enmienda de devolución presentada por el PP al proyecto de ley de la memoria histórica, lo que dio luz verde a su tramitación parlamentaria. La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, se encargó de defender el proyecto del Ejecutivo al comienzo del debate de totalidad, al que asistió Rodríguez Zapatero, y la definió como “heredera del espíritu de la Transición”, mientras el PP pidió la retirada del proyecto por “extemporáneo” e “hipócrita”. El veto del PP sólo contó con los votos de su grupo, mientras que las enmiendas de IU-ICV y ERC recibieron el apoyo de los proponentes así como del BNG, EA y Nafarroa Bai. IU-ICV, ERC y CiU exigían la anulación plena de los juicios sumarísimos, cuestión que no prevé la ley. De la Vega hizo notar que además de reconocer, con carácter general, la injusticia de las condenas del franquismo, la nueva norma “va un paso más allá” y reconoce su derecho y el de sus familias a una “declaración singular” y a una “reparación” individual de la injusticia que sufrieron.