Además de Louzán, viajaron para participar de los festejos el alcalde de Lalín, José Crespo Iglesias y la alcaldesa de Silleda, Paula Fernández Pena (quien asistió el pasado domingo 28 de septiembre a la conmemoración del centenario de la fundación de la Asociación Hijos de Silleda). Entre las autoridades invitadas, destacaron también las presencias de la secretaria de la Oficina Delegada de la Xunta de Galicia en Buenos Aires, Amparo Castaño; el presidente de la Unión de Sociedades Gallegas, José Luis Sangiao; el subsecretario de Presidencia de la Nación Argentina, Gustavo López, y la intendenta de Chascomús, Liliana Denot, municipio que desde hace unos años se encuentra hermanado con el ayuntamiento de Lalín; todos ellos fueron recibidos por el presidente de la centenaria entidad, Marcial Sánchez González.
“Cien años son más que una vida, y por lo tanto era una grata obligación que tanto el presidente de la Diputación de Pontevedra como el alcalde de Lalín estuviéramos presentes en esta jornada tan especial”, recalcó Louzán a España Exterior, para luego aclarar: “Yo no vengo en temporada electoral, sino que vuelvo siempre a Argentina para estar con nuestra gente haya o no haya elecciones, y hoy había un motivo muy especial para estar aquí”.
En ese sentido, destacó que la llegada de la institución que representa a Lalín a sus primeros cien años de vida es un orgullo no sólo para los emigrantes que con tanto esfuerzo sentaron las bases de esta sociedad señera dentro de la comunidad gallega residente en Argentina, sino también para toda Pontevedra. “Sin dudas hoy es uno de esos días en los que este centro vuelve a revivir con esplendor; siento una gran felicidad por estar hoy aquí y ver a la gente que ha llenado al salón de bote en bote y las ganas que demuestran por participar de esta fiesta”, señaló Louzán. Asimismo, expresó palabras de elogio al presidente del centro, a quien definió como “el buque insignia de esta gran colectividad de Lalín y de las comarcas que se agrupan en esta entidad”.
Uno de los momentos más emocionantes de la jornada se vivió cuando Louzán le entregó a Sánchez el Premio Entreculturas 2008 por la intensa labor del Centro Lalín a favor de los emigrantes gallegos en Argentina, un galardón que está dotado con 6.000 euros que, según el Presidente de la Diputación de Pontevedra, “seguramente le vendrá muy bien a un centro con estas características”.
Por su parte, el alcalde de Lalín expresó al público presente el orgullo que significa para el ayuntamiento que dirige el contar en Argentina con una institución que es el referente para todos aquellos emigrantes de la Comarca del Deza y que es un ejemplo del trabajo y el esfuerzo de los miles de gallegos que tuvieron que dejar su tierra.
Crespo también recordó que desde el año 2005 el ayuntamiento de Lalín presta un servicio de información y asesoramiento a emigrantes, emigrantes retornados e inmigrantes a través de un equipo formado por un trabajador social y una asesora jurídica.
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Un ‘cruceiro’ en el Hogar Español de Montevideo y un catálogo del patrimonio artístico de la emigración
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“Me gusta cumplir con mis compromisos”, aseguró Rafael Louzán en todas las reuniones que mantuvo con la colectividad gallega y en particular los pontevedreses, explicando en rueda de prensa que venía como había prometido “a ver las obras que ayudamos a ejecutar y a inaugurar esta seña de Galicia como es el cruceiro realizado por la escuela de canteiros de Pontevedra”
Precisamente esta fue la obra que inaugurada el pasado sábado en el Hogar Español de Ancianos de Montevideo, donde en un cruce de caminos y bajo la sombra del piñeiro que plantara el entonces presidente de la Xunta, Manuel Fraga Iribarne, el cruceiro que tiene en su base los tres escudos, de Pontevedra, Galicia y Uruguay, ahora será objeto de admiración de todos los que lleguen hasta esta casi una hectárea de suelo español en Uruguay. Louzán tiene un ingrediente aún mayor en esta institución de acogida y es su tío Manuel Abal, hermano de su madre, que allí reside.
Luego se reunió con la directiva y también la comisión de residentes, recogiendo el guante que le tiró el presidente del Hogar, José Pena, quien explicó que habría que sanear el déficit mensual de 60.000 dólares que tiene.
Posteriormente recorrió las instalaciones departiendo con varios residentes pontevedreses, para culminar inaugurando el cruceiro bajo un tibio sol primaveral.
Louzán también estuvo en Montevideo visitando otras obras financiadas por la Diputación de Pontevedra. Estos fueron en el Centro Gallego, el más antiguo del mundo, que ahora tiene una cancha de medidas reglamentarias de la FIFA con iluminación acorde con el campo de juego, donde participa el equipo de fútbol universitario de la institución.
También visitó el segundo gimnasio del Valle Miñor, que pudo ser techado gracias a la diputación de Pontevedra, y que ahora viene siendo acabado su piso para poder practicar en él fútbol de salón, añadiéndole también una barbacoa.
También visitó el Centro Recreativo Alma Gallega, donde informó que firmará un convenio en Buenos Aires para realizar un catálogo del acervo artístico gallego en el Río de la Plata. Explicó que “todos los fondos artísticos que tienen todos los centros pontevedreses y gallegos de la emigración, así como colecciones públicas y privadas, serán inventariados y conservados por la Fundación Mundo Nuevo”, asegurando que “el mismo se hará a través del Museo de Pontevedra que es de la diputación”.
Anunció también que “en un período relativamente corto, mi idea sería poder plasmar una exposición en Uruguay, en Argentina y en Galicia en Pontevedra con todo lo que tenemos en la emigración”.
Louzán también participó en la conmemoración de los 50 años del Centro Pontevedrés de la capital uruguaya, que preside Andrés Ferreira, y a la que acudieron medio millar de personas.