El vicepresidente explicó que la Xunta reclamará al Gobierno central la delegación de competencias para poner en marcha este mecanismo.
Quintana se refirió además al protocolo de actuación que el Gobierno gallego comenzó ya a elaborar para estos casos de violencia de género con una reunión al más alto nivel con los principales actores y Administraciones implicadas en este problema. Según el vicepresidente, este protocolo será presentado en el Parlamento este mismo mes, para que los distintos grupos parlamentarios puedan realizar sus aportaciones al documento.
Quintana recordó también que la Vicepresidencia de la Xunta está elaborando el anteproyecto de la Ley Gallega contra la Violencia de Género, que está en fase de consultas a los sectores y asociaciones implicadas y será llevado previsiblemente al Parlamento durante este período de sesiones.
En respuesta a una pregunta del PPdeG, el vicepresidente defendió la transversalidad que el Ejecutivo gallego está aplicando en todos sus departamentos, asegurando que en estos seis meses de nuevo Gobierno todos sus departamentos han tenido en cuenta en sus políticas mecanismos de igualdad entre hombres y mujeres.
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Las maltratadas ya pueden pedir el ‘salario de la libertad’
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Quintana, anunció también la entrada en vigor del llamado ‘salario de la libertad’, que la Vicepresidencia pagará a las mujeres maltratadas, una vez que el Diario Oficial de Galicia publicó la orden que lo regula coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer.
Las víctimas de malos tratos ya pueden empezar la tramitar las solicitudes de estas ayudas, que según el vicepresidente, se conciben como un instrumento destinado a facilitar la independencia económica de las mujeres maltratadas, ya que justo la falta de autonomía económica es uno de los mayores obstáculos que encuentran para rehacer sus vidas.
Las ayudas quedan fijadas en 600 euros al mes para las mujeres con ingresos inferiores o iguales al salario mínimo (SMI) o que acrediten una discapacidade igual o superior al 33%; 400 para las mujeres con ingresos que no superen el doble del SMI; y 200 para las mujeres con ingresos superiores entre el doble y el triple del salario mínimo. Estas ayudas podrán incrementarse en 50 euros más por cada hijo o hija menor de edad que tengan a su cargo.