En 1870 el expresidente de la República Argentina, Bartolomé Mitre, en la discusión sobre una ley de emigración, decía que “los irlandeses, galeses, vascos, genoveses y gallegos tal vez tenían una tendencia más acentuada a emigrar en razón de su origen celta”. Es como si los pueblos de origen celta les arrastrase una fuerza telúrica que les provoca el desplazamiento masivo, cual diminutas angulas que periódicamente se desplazan desde el Mar de los Sargazos hasta las desembocaduras de nuestros ríos. ¡Qué atrevida es la ignorancia!
Los irlandeses, genoveses, gallegos…”emigran porque les falta el pan, las patatas, la libertad”, como atinadamente decía Julio Camba. “…Y si Vd quiere que un celta migratorio se convierta en sedentario, ofrézcale una patata”
Ahora mismo el fenómeno migratorio ya no sólo es por causas de supervivencia o de represión política, pues hay otras móviles que inciden en la necesidad de emigrar, como el adquirir otros conocimientos, el intercambio cultural, el conocer y alcanzar nuevos retos personales, buscar una mejor calidad de vida…De manera que si consultamos los datos migratorios de distintos países de la UE, y la intención de emigrar, resulta que los españoles somos los más sedentarios, ya sea por razones familiares, problemas de idiomas, o rechazo a costumbres foráneas. Curiosamente son los daneses los que, en un porcentaje de un 51%, no tienen inconveniente en emigrar a otro país, seguidos de los suecos, 38% y los británicos, el 26%; según el Eurobarómetro de la Comisión Europea.
Pero al margen de cuáles sean las razones de la emigración actual, hay algo que nos preocupa profundamente: ¿Qué es lo que estamos haciendo para ESCUCHAR LA VOZ DE LA EMIGRACIÓN y RESOLVER LOS PROBLEMAS QUE LE AFECTAN?
Es posible que 2.000.000 de españoles vivan fuera de España. Y las razones para emigrar son bien diferentes, en su mayoría, a los que justifican la salida de alemanes, ingleses o suecos que viven en nuestra Costa del Sol, Canarias o Mallorca. ¿Más leyes para regular esa situación? No, por favor. La hemorragia legislativa de este país alcanza la suma de 100.000 leyes y otro tipo de normas , de las que 67.000 son autonómicas. ¿Más funcionarios para atender este problema? Creo que no, y menos en un país como el nuestro en donde ya hay 2.5 millones de funcionarios, con un aumento de 470.000 los últimos 10 años.
Dos millones de españoles son muchos españoles para que se trivialice con este tema y limitemos nuestra aportación a enviarles empanadas, buen pulpo y una gaita, que está muy bien, pero que no soluciona el problema. ¿Quienes y por qué emigran los españoles? No es más que una pregunta, desnuda de color ideológico, y que pretende recabar la atención del Estado, porque la emigración no es una cuestión de partidos, es un problema de Estado, o un problema de los Estados Y las cuestiones de Estado se tratan con muchas dosis de sensatez, de ponderación y de conocimiento de la realidad.
Tengo la sensación que algo se está moviendo en esta línea, pero muy despacio y sin un programa amplio y consensuado por todos… ¿Me equivoco?