Protesta ante la Embajada de España en París contra el desmantelamiento de las Aulas de Lengua y Cultura

200 personas convocadas por APFERF denunciaron la falta de profesores, el cierre de aulas y el caos organizativo que perjudica a las familias

Más de doscientas personas de todas las edades se manifestaron ante la sede de la Embajada de París.

Bajo el lema &#145Ni un niño español sin escuela española&#146, y en respuesta a la falta de interés por arreglar este problema por parte de la Embajada de España, los organizadores denunciaron la insuficiencia actual de las ALCES (Aulas de Lengua y Cultura Españolas) en Francia, a las que apenas tienen acceso un tercio de su alumnado potencial, y la disminución del número de grupos y de profesores en un momento que la demanda crece.
El caso de París tanto en 2005 como en 2006 se atribuye a cambios generales injustificados y no anunciados de profesores llegándose a realizar algunos después de comenzado el curso 2006 impidiendo toda planificación pedagógica. Cambios generales e injustificados de horarios anunciados a finales de junio después de realizadas las inscripciones, con el consiguiente perjuicio para las las familias.
También denunciar la violación en 2005 del espíritu de la normativa relativa al número de alumnos necesarios para mantener un aula y en el cierre este año de aulas y grupos con suficiente numero de alumnos inscritos.
Al comienzo del curso los niños se encuentran con puertas cerradas y pérdida de semanas , incluso de meses de clase en varias aulas por no haberse previsto el reemplazo de profesores. También se da que dentro del casco urbano de París se concentra la oferta educativa en el centro y en el oeste parisino mientras que hay una presencia ridícula en los distritos populares del norte y del este, tras la desaparición de las aulas de Hermel (14 inscritos), Baudelaire (24 inscritos) y Bergson (60 inscritos) que no han sido reemplazadas por una oferta sustitutiva adecuada.
Niños de nueva inscripción no reciben la convocatoria del día y hora del comienzo de las clases, los centros de acogida no reciben la demanda de aulas antes del comienzo del curso y a los padres que llaman al Consulado para informarse les responden que estas clases no existen.
Por todo esto, los manifestantes exigen de una forma inmediata y satisfactoria para los niños inscritos en aulas desaparecidas, en especial Baudelaire, Hermel, Laugier, y con particular urgencia, Henri Bergson, que no han encontrado una oferta sustitutoria adecuada a sus grupos desaparecidos, un compromiso de estabilidad de lugares, horarios y profesores para los próximos cursos y la garantía de que se abrirán nuevas aulas si hay matrículas suficientes.
También reclaman la vinculación de la exigencia de 3 horas lectivas en los grupos de nivel II,III y IV y a la impartición de las clases en locales adecuados de preferencia en centros escolares públicos y particularmente en el extrarradio de París a la búsqueda consensuada de horarios razonables y compatibles con los horarios escolares, así como la convocatoria urgente de las tres plazas de profesores funcionarios cuyo contrato terminó al final del curso 2004-2005.


Piden la dimisión del consejero de Educación, Javier Pérez Bazo

Esta manifestación contó con el apoyo de la Federación del movimiento asociativo español en Suiza así como de la Confederación Europea de Asociaciones Españolas de padres de Familia.
Asimismo, los padres y madres de alumnos de la Agrupación de Lengua y Cultura de París y la Confederación de Asociaciones de Padres de Familia Españolas Residentes en Francia enviaron una carta a la ministra de Educación, Mercedes Cabrera Calvo-Sotelo, en la que le piden el cese del actual consejero de Educación en Francia, Javier Pérez Bazo, por su talante autoritario, su arrogancia política rebozada con manejos y mentiras, que han sido la causa de llegar a estos extremos, según la Confederación.