Profundo dolor entre la colectividad gallega en Argentina por el fallecimiento del pintor Manuel Cordeiro

Llegó a Argentina en 1952 y fue un dirigente comprometido con la galleguidad

Manuel Cordeiro.

La colectividad gallega de Argentina recibió con profundo dolor y tristeza la noticia del fallecimiento de Manuel Cordeiro, uno de los artistas plásticos más respetados y reconocidos en el mundo de la emigración, quien murió el pasado jueves 10 de mayo a las 18 horas en una habitación del hospital del Centro Gallego de Buenos Aires luego de batallar contra una grave enfermedad.

Nacido en A Coruña en 1927, Cordeiro se interesó por el arte desde muy joven, teniendo como maestro y guía a don Francisco Vales Villamarín; al igual que miles de sus paisanos, en 1952 armó las maletas en búsqueda de un futuro mejor y emigró a Argentina, integrándose rápidamente al mundo artístico y social de la colectividad gallega de Buenos Aires.

En la capital argentina alternó su condición de dibujante con la de dirigente comprometido fervientemente en la defensa de la galleguidad y el pensamiento nacionalista inspirado en figuras como Pondal, Curros Enríquez, Rosalía de Castro y Alfonso Daniel Rodríguez Castelao.

Algunos de los puntos más destacados de su trayectoria como dirigente fueron la representación en 1956 del Centro Coruñés como delegado ante la intersocietaria gallega, participando con el mismo cargo en el Congreso de la Emigración en América que se desarrolló por aquel entonces. Además, fue secretario de estudios de Mocedades Galeguistas e integró durante muchos años la comisión de cultura del Centro Galicia de Buenos Aires.

En los últimos tiempos se desempeñó como vicepresidente del Instituto Argentino de Cultura Gallega del Centro Gallego de Buenos Aires y de la Fundación de Cultura Gallega Xeito Novo.