PP y PSOE enfocan la precampaña electoral de las municipales y autonómicas sin perder de vista los pactos

Mantienen sus mensajes pero también la alerta ante la subida de Ciudadanos y la división en la izquierda

Mariano Rajoy y varios de los candidatos del PP a las autonómicas en el acto en Madrid.
Sánchez y González con los cabezas de lista del PSOE en Madrid para las elecciones.

Así como se deciden los regidores de los ayuntamientos de toda España.
Tras las elecciones en Andalucía, donde el PSOE sigue negociando con Podemos y Ciudadanos la investidura de Susana Díaz como presidenta, y con las distintas encuestas que se van conociendo tanto PP como PSOE dejan entrever la posibilidad de entendimientos con otras formaciones, aunque mantengan los mensajes habituales a sus votantes.
Es el caso del Partido Popular, que celebró un acto de presentación de sus candidatos a las autonómicas en el que el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, reiteró su optimismo por la mejora de la economía y su alerta ante los demagogos y los populistas. Sin embargo, dirigentes de su partido muestran signos de acercamiento a formaciones como Ciudadanos, que no para de recibir adhesiones y militantes provenientes sobre todo de Unión Progreso y Democracia (UPyD) inmersa en un proceso de descomposición interna.
Y es que dirigentes y cabezas de lista de UPyD de varias comunidades autónomas han abandonado el partido tras pedir la dimisión de Rosa Díez en su liderazgo y la unión con Ciudadanos, una formación que puede ser clave en el corto y medio plazo.
Por su parte, el Partido Socialista celebró su Conferencia Municipal en la que denunció una desigualdad brutal en España y en la que el expresidente del Gobierno, Felipe González, pidió el apoyo para el líder del PSOE, Pedro Sánchez. También sus candidatos se preparan para pactos con una izquierda muy dividida. Mientras que Podemos busca nexos de unión en sus programas para las autonómicas.
En Cataluña se volvió a romper el frente independentista y ya sólo Convergencia -sin Unió- y Esquerra Republicana defienden una nueva hoja de ruta con elecciones para ellos plebiscitarias que se mantienen el 27 de septiembre y la secesión en 18 meses si ganan los comicios.