Podemos logra un ajustado triunfo en el voto exterior mientras el PSOE se desploma y el PP aguanta el tipo

Los de Pablo Iglesias recibieron 23.908 votos, tres mil más que el Partido Popular que obtuvo 20.942 / La participación fue de un ridículo 4,7% al ejercer su derecho 88.900 españoles de los 1.880.064 censados

Escrutinio del voto emigrante en la Junta Electoral Provincial de A Coruña el pasado 23 de diciembre.

Podemos fue el partido más votado por los ciudadanos españoles residentes en el extranjero que participaron en las elecciones generales del 20-D. Los de Pablo Iglesias lograron 23.908 votos, el 27% de los 88.416 votos válidos que fueron escrutados en las juntas electorales provinciales el pasado 23 de diciembre.
De todos modos, la victoria de la formación morada fue muy ajustada ya que superó al Partido Popular en tan solo tres mil votos. El PP logró 20.942 sufragios, el 23,7% del total de votos válidos. Pero para ser la primera vez que se presentan a unas elecciones generales, Podemos ha logrado una victoria significativa.
Cabe recordar que el PP había logrado en 2011 un total de 27.615 sufragios que en aquellas elecciones generales supusieron el 37,8% de los votos por lo que el retroceso que ha padecido en estas elecciones ha sido de nada menos que 14 puntos porcentuales. Cuatro años antes, en 2008, los ‘populares’ habían logrado 106.267 sufragios, el 28% del total.
Más llamativa ha sido la caída del Partido Socialista que tradicionalmente ha contado con el favor de los residentes en el extranjero pero que en esta ocasión solo obtuvo 14.885 sufragios, el 16,8%, muy lejos de Podemos y PP.
Al PSOE le ha ido mal e incluso casi le supera Ciudadanos, una formación que también es la primera vez que se presenta a unas elecciones generales y que ha logrado 14.465 votos, 420 papeletas menos que los socialistas.
Los resultados del Partido Socialista han ido descendiendo desde 2008. En aquella ocasión lograron nada menos que el 57,4% de los votos, es decir 217.723 papeletas, una cifra espectacular. Sin embargo, cuatro años más tarde se tuvieron que conformar con el 38,5% y 28.104 votos, un descenso de casi 20 puntos porcentuales en tan solo cuatro años.
Y ahora, en 2015, el PSOE se ha vuelto a desplomar y ha perdido otros veinte puntos para quedarse con un apoyo del 16,8% de los votos válidos, un total de 14.885.
Otras formaciones lograron un apoyo mucho menor. Así, Unidad Popular -coalición en la que se integró Izquierda Unida- solo obtuvo 3.406 votos, el 3,8%; Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), 2.407 votos, el 2,7%; y Democracia i Llibertat (coalición en la que se integró Convergencia Democrática de Catalunya), que recibió 1.511 votos, el 1,7%.
Un ridícula participación del 4,7%
Una vez más, la normativa que regula el voto exterior ha privado de un derecho tan fundamental en una democracia como es el del voto a cientos de miles de españoles residentes en el extranjero.
El número total de censados que estaban llamados a votar en estos comicios ascendió a 1.880.064 personas. De ellas solamente 151.061 solicitaron el voto a través de un procedimiento endiablado y cuyo objeto parece no ser otro que dificultar el ejercicio del derecho que pretende garantizar. Finalmente entraron en urnas 88.900 papeletas por lo que participación fue de un ridículo 4,7% respecto al censo y de un 58,8% respecto a las solicitudes.
Es decir que hay cerca de un 40% de españoles en el exterior que, habiendo manifestado su deseo de votar, no han podido hacerlo o, finalmente, no han querido hacerlo.
De las 88.900 papeletas que entraron en las urnas, 438 fueron votos en blanco y 484 votos nulos por lo que los votos válidos (votos a candidaturas y votos en blanco) sumaron 88.416.
En las elecciones generales de 2011 el número de censados fue de 1.482.786 de los cuales votaron 73.361, el 4,9% -una participación muy similar a la de ahora- y solicitaron el voto 138.037 personas, el 9,3% del total de inscritos en el CERA hace cuatro años, un punto más que en esta convocatoria. Además, en los anteriores comicios generales el porcentaje de participación en relación al número de solicitudes fue del 53,1%, es decir, casi seis puntos porcentuales menos que el pasado 20-D.
Pero no hay que olvidar que en las elecciones generales anteriores a la reforma de la Ley Electoral, las que se celebraron en 2008, la participación fue, nada más y nada menos, de un 31,7% y en España se recibieron un total de 382.568 votos. Unas cifras mareantes vistas hoy en día pero que hay que recordar para darse cuenta de la relevancia que podría haber tenido en estas elecciones el voto de los españoles en el extranjero .
El PP mantiene el escaño en Granada
El PP ha mantenido sus tres escaños por la provincia de Granada ya que el PSOE no consiguió lograr 745 votos más que el Partido Popular después del escrutinio del voto del extranjero. En esta provincia el partido ganador fue Podemos, que obtuvo 568 papeletas a su favor, segundo fue el PSOE (con 442 votos), tercero el PP (384 papeletas) y cuarto Ciudadanos, con 362.