000 republicanos españoles en el campo de concentración de esta localidad francesa.
El padre del propio Ibáñez fue en 1939 uno de los españoles que, a causa de sus ideas anarquistas, tuvo que exiliarse a Francia, donde finalmente fue internado en los campos de Saint-Cyprien y de Argelès.
Obligados por las autoridades francesas, miles de republicanos cruzaron igualmente la frontera franco-española y pasaron a vivir en condiciones inhumanas, algo que ahora se recuerda en el marco de un movimiento que persigue la recuperación de la memoria histórica de hijos y nietos de republicanos españoles.
Paco Ibáñez, que inició su carrera en 1954, fue candidato en 1993 al Premio Príncipe de Asturias junto al resto de cantautores españoles de su generación, y ha rechazado en dos ocasiones la Medalla de las Artes y las Letras de Francia pues, en su opinión, los premios y concesiones pueden implicar pérdida de libertad.