El presidente de la Confederación de las Bombas Españolas de Chile, el nieto de mallorquín Andrés Salinas Ripoll, expresó en Palma su deseo que de Baleares colabore con las Bombas Españolas de Chile, especialmente después del terremoto que asoló el país. “Ojalá la bandera mallorquina pueda lucir en las Bombas Españolas de Chile”, indicó a Baleares Exterior, tras reunirse con representantes del Ayuntamiento de Palma, que estudiarán la colaboración.
Andrés Salinas Ripoll, que forma parte de la directiva de la Casa Balear de Chile, destacó que el terremoto, aunque no afectó personalmente a los isleños, sí que causó numerosos daños en las Bombas Españolas, de modo que también se vio afectada la número diez, formada por una treintena mallorquines, todos ellos voluntarios, al igual que el resto de los miembros de las Bombas Españolas. Señaló que es mucho lo que necesitan para recuperarse y destaca la colaboración efectuada por la Comunidad de Madrid y por Valencia.El objetivo del viaje de dos semanas de Salinas Ripoll a España, además de personal -ya que tuvo la oportunidad de visitar la casa en la que nació su padre, junto a la catedral de Palma, acompañado por el historiador Joan Buades- se centró en conseguir colaboración para las Bombas Españolas.
Estuvo en Valencia, Galicia, Madrid y Mallorca, en donde permaneció del 21 al 24 de junio y tomó contacto, además de con el Consell, con la directora general de Emergencias del Ayuntamiento de Palma, Pepa Peláez, en el Parque de Bomberos del Polígono de Son Castelló; junto a la gerente de la Fundació Balears a l’Exterior, Pepi González, y el oficial jefe de Bomberos, Manuel Ángel Nieto.Pelaez se comprometió a estudiar una posible colaboración, que podría ser tanto en el envío de material, como en la prestación de formación a los bomberos, aunque no se cerró ningún acuerdo. Por parte de la Fundació, se remitió a solicitar ayuda a través de la Casa Balear de Chile, ante la Conselleria d’Immigració en el marco de la convocatoria de proyectos de cooperación. “Espero que los bomberos no tengan que estar con el tarro pidiendo en la calle, porque eso es denigrante”, señaló Salinas Ripoll, que hace un balance positivo de los contactos mantenidos en las Islas Baleares.