No en vano, se trata de más de ochocientas mil salidas. Esta frase es de Antonio Pérez Díaz, director del curso ‘La emigración y los emigrantes en Extremadura’ que se celebró en Azuaga.
Los asistentes abordaron aspectos científicos y académicos sobre las migraciones y otros más afectivos, con el testimonio de los protagonistas de la emigración y su percepción de Extremadura desde la distancia. Pérez Díaz, profesor de Análisis Geográfico Regional en la Universidad de Extremadura indicó que entre 1991 y 2004 se han contabilizado un total de 144.800 partes de baja cursados por emigrantes que salieron de la región con destino a otras comunidades española, apuntó.
Aunque estos datos no admiten parangón con los de los sesenta y setenta, implica la salida anual del 1% de la población regional. Madrid, Barcelona y Sevilla son los principales centros de atracción de la emigración extremeña por la oferta laboral que generan en el sector de la construcción. “Baleares se ha consolidado en los últimos años como un centro de importancia creciente en el destino de los extremeños por el impulso del sector turístico”.
Es el mismo caso de Málaga, Las Palmas, Santa Cruz de Tenerife, Tarragona y Valencia, que en conjunto atrajeron a 8.305 extremeños.