Miranda se reunió con el interventor del Centro Gallego de Buenos Aires para conocer de primera mano la situación actual de la entidad

Le trasladó la preocupación del Gobierno gallego por que se mantenga la atención de calidad a los socios y que se mantenga la actividad cultural de la entidad

Camba, La Blunda y Miranda en el Centro Gallego de Buenos Aires.
Antonio Rodríguez Miranda con los alumnos del Colegio Santiago Apóstol.
Miranda junto a los directivos del Centro Galicia a su llegada a la institución.

El objetivo del encuentro era conocer de primera mano la situación actual de la centenaria institución y trasladarle la preocupación del Gobierno gallego en cuanto a la atención que reciben sus socios

Acompañado por el consejero de Empleo y Seguridad Social de España en Argentina, Santiago Camba, y el delegado de la Xunta en el país austral, Alejandro López Dobarro, Miranda mantuvo con La Blunda un encuentro que se prolongó por casi una hora.

“Ha sido una entrevista satisfactoria en la que hemos podido trasladarle la preocupación del Gobierno gallego en cuanto a que esta institución pueda seguir avanzando en el camino de brindarles a los socios una atención de calidad desde el punto de vista sanitario y que pueda continuar funcionando con toda su actividad cultural”, explicó el secretario xeral al finalizar la reunión.

En ese sentido, recalcó la importancia que representa para la Xunta que todos los socios del Centro Gallego “puedan seguir recibiendo las mismas prestaciones, si cabe, con mejor calidad día a día”, y que la centenaria institución “logre solventar la situación actual para que en el futuro vuelva a ser gestionada por sus asociados”.

Miranda aclaró que la Xunta “debe ser respetuosa” respecto a la actuación de la intervención del INAES (Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social) dado que la misma ha sido ordenada por la justicia argentina,  y agradeció el recibimiento de La Blunda porque “hemos podido intercambiar impresiones y obtener información de primera mano en cuanto al trabajo, las actuaciones e inversiones en los servicios que están realizando”.

Entre los puntos que destacó, el secretario xeral hizo hincapié en la participación que la intervención les está dando en este proceso a los socios del Centro Gallego, cuyas inquietudes fueron consultadas en una encuesta que contó con la participación del 30 por ciento de la masa societaria, y a las diferentes agrupaciones políticas de la entidad.

Respecto a la situación patrimonial de la institución, Miranda adelantó que acordó intercambiar con La Blunda información relativa al inventario “para contrastarla y comprobar que todo esté correcto, ya que el resguardo de todo ese patrimonio cultural y artístico tiene para nosotros un gran valor emotivo desde el punto de vista de la identidad de Galicia”.

Por su parte, el interventor valoró positivamente esta primera toma de contacto con Miranda, de quien recalcó el interés que le manifestó respecto a la situación de la institución. “Queremos mantener esta buena relación porque eso servirá para que el Centro Gallego siga mejorando”, afirmó.

La Blunda subrayó que el proceso de intervención “está marchando bien en términos generales”, aunque admitió que lo que recauda la institución por los ingresos provenientes de cuotas sociales no alcanza para solventar todos los gastos de mantenimiento del hospital y que apenas alcanza para cubrir los servicios que reciben sus socios: “El edificio necesita mucho mantenimiento, ya que cuenta con más de 27 mil metros cuadrados. La reparación del sistema eléctrico, que era muy anticuado, costará más de dos millones de pesos (más de 300 mil euros), y si bien el Estado argentino ha puesto muchísimos recursos, tenemos que hacer inversiones de mantenimiento enormes”.

Según explicó, además de preservar todas las fuentes de trabajo de la institución, en los últimos meses se han hecho obras de remodelación y puesta a punto en el sector de terapia intensiva con personal de la casa, reduciendo el coste de las mismas en un 90 por ciento, y se ha comenzado a fabricar dentro de la institución las gasas que utilizan los pacientes, logrando así ahorrar 150 mil pesos mensuales.

Asimismo, destacó la reapertura de la farmacia mutual y el rediseño del sistema de facturación, lo que ha permitido que los ingresos mensuales de la institución se incrementen de 1,8 millones de pesos desde el inicio de la intervención en agosto del año pasado a 5,4 millones en la actualidad.

“Necesitamos apuntalar todo este trabajo con una mayor colaboración de los socios, que en definitiva son los dueños de la institución”, explicó La Blunda al informar que ya ha enviado a los asociados un bono de contribución voluntaria de 500 pesos. Asimismo, destacó que el lanzamiento de una amnistía para los socios que habían dejado de pagar sus cuotas ha permitido la reincorporación al padrón de unas 300 personas, por lo que la misma se extenderá por tres meses más.