El pasado 15 de diciembre se celebró en la ciudad de Matanzas la Fiesta de la Colla, evento que cada año reafirma sus raíces catalanas y de otras autonomías ibéricas como la gallega, andaluza, canaria o extremeña, cobrando durante sus festejos relieves históricos y culturales.
El nuevo aniversario estuvo dedicado a los 138 años de la construcción de la Ermita de Montserrat y al 320 de la fundación de esta ciudad yumurina conocida como la Atenas de Cuba.
Pasacalles, exposiciones en la Biblioteca Provincial ‘Gener y del Monte’, conciertos de la Banda Municipal, de la Orquesta Sinfónica, de Habaneras, Coro de Cámara y el Juvenil así como otras acciones de la Compañía Flamenca, miniferias del libro español, venta de vinos y comidas españolas, colmaron las cuatro jornadas del evento.
Rememorando lo ocurrido el 8 de septiembre de 1871, cuando muy temprano en la mañana “nueve bandas de las fuerzas de voluntarios de la ciudad rompieron diana» frente al Palacio de Gobierno, para “la gran fiesta”, en la mañana de este domingo 15 partió el desfile de la Colla, desde el Parque de La Libertad.
Esta vez a la tradición se sumó la riqueza folclórica de los ritmos ibéricos, que jóvenes de la Agrupación Artística Gallega interpretaron por las calles de Matanzas hasta la Ermita de Montserrat, acompañados entre otros por los grupos: Olé, Olé, Alma Flamenca y Trencito de la Alegría.
La bandera cubana presidía el conglomerado, junto a las de España, Galicia, Asturias, Islas Canarias y otras autonomías. Un gigante y simbólico pan, portado por jóvenes cubiertos con barretinas, y los látigos de Roberto González Báez ‘El Charro’, aportaron peculiar colorido al escenario.
El recorrido también llevó la imagen de la Virgen de Montserrat ‘La Moreneta’; réplica escultural interpretada por artesanos matanceros, presididos por César Lázaro Batista Robaina, con el apoyo para su pintura del equipo dirigido por el diseñador y escritor Rolando Estévez Jordán. Entre los presentes se encontraban Marta Odalis Hernández Ávila, presidenta del gobierno municipal, y Carlos Torrent Molina, director provincial de Cultura.