Este apoyo de la administración autonómica al turismo pretende dotarlo de unos niveles de calidad que distingan a la región de otros destinos turísticos, explicó la consellera de Turisme, Angélica Such.
“Es fundamental mejorar año tras año nuestros establecimientos para poder ofertar cada vez mejores servicios que satisfagan a los turistas que nos visitan, y muestra de ello son los 157 proyectos subvencionados este año”, subrayó Such.
Estas ayudas se desarrollan a través de diversos programas, como el relativo al aumento de categoría de establecimientos hoteleros, o el de seguridad en centros turísticos, al que la consellera se refirió como de los elementos de mayor importancia, “ya que evita riesgos que pueden afectar directamente a los establecimientos y fundamentalmente, a los clientes y trabajadores turísticos”.
Turisme también ha adjudicado ayudas para adaptar centros turísticos para personas con discapacidad, para la creación de alojamientos de turismo rural, para mejorar la higiene alimentaria, para la creación de establecimientos de interés singular, de apoyo al turismo náutico y de salud.