Son chicos y chicas de entre los 16 y 20 años de edad, con raíces españolas y en muchos casos asturianas. Les acompañan cuatro monitores.
La organización de esta actividad corre a cargo de la Asociación Estadio Español y cuenta con la colaboración del Gobierno central de España y de las comunidades autónomas. Como bienvenida, los responsables de emigración del Principado les ofrecieron una espicha en el llagar Trabanco de Lavandera, en Gijón.
El grupo visitó Cangas de Onís y la Basílica de Covadonga. También Oviedo y Gijón, donde pernoctaron, además de Luarca.
La Consejera de Presidencia, Justicia e Igualdad, María José Ramos, valora la importancia que tienen este tipo de iniciativas para mantener vivos los vínculos de la población emigrante con su tierra ya que, destaca, “en muchos casos se trata de la primera visita que realizan a la tierra donde nacieron sus padres o sus abuelos, en definitiva de descubrir sus raíces”.