El ministro de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, ha dado instrucciones para que el embajador español en Caracas, Antonio Pérez-Hernández, vuelva a Venezuela después de haberlo retirado en protesta por los «insultos» del presidente, Nicolás Maduro, al jefe del Gobierno, Mariano Rajoy.
El pasado 8 de abril el Gobierno elevó su protesta ante Venezuela tras los «intolerables insultos» de Maduro a Rajoy al que tildó de «racista, basura corrupta y basura colonialista» y llamó a consultas al embajador, que supone su retirada temporal del país caribeño.
En declaraciones a TVE, el jefe de la diplomacia española ha explicado hoy que ha dado instrucciones para que el embajador vuelva debido, ha recordado, a que está en Venezuela el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero en una labor de mediación y a que el lunes 23 de mayo viajará al país el líder de Ciudadanos, Albert Rivera.
Además, ha continuado García-Margallo, en Venezuela hay 400.000 españoles o con doble nacionalidad que «necesitan protección».
El titular de Exteriores ha afirmado que Venezuela está en una situación «absolutamente imposible» y ha añadido que «tal y como está hay que desplegar el servicio exterior».
Sobre Zapatero, que llegó ayer a Caracas con los exmandatarios de Panamá Martín Torrijos y de la República Dominicana Leonel Fernández para intentar mediar entre el Gobierno venezolano y la oposición, García-Margallo ha señalado que ha hablado con él y que cumple «respetuosamente las obligaciones de informar al Gobierno».
No obstante y preguntado si esa visita puede ayudar, el ministro ha destacado: «Tengo muy pocas esperanzas en esa mediación».