Madrid y Rabat sellan un acuerdo de cooperación en infraestructuras

Por valor de 520 millones de euros

Este ha sido el objetivo principal de la IX Reunión de Alto Nivel celebrada en Madrid entre los dos gobiernos.
En rueda de prensa conjunta del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el primer ministro marroquí, Abbas el Fassi, también salió a relucir el contencioso del Sáhara, en el que el jefe del Gobierno español insistió en la necesidad de que Marruecos llegue a un acuerdo con los saharauis auspiciado por Naciones Unidas y en el que cada una de las partes tendrá que demostrar “capacidad de ceder posiciones”.
La financiación española en el nuevo acuerdo de cooperación con MarruecoS irá dirigida principalmente a proyectos en sectores de energías renovables, agua, medio ambiente e infraestructuras de transporte y telecomunicaciones.
Según precisa el acuerdo, el Ministerio español de Industria, Comercio y Turismo pondrá a disposición del departamento marroquí de Economía y Finanzas facilidades financieras por un importe de 520 millones de euros.
En la distribución habrá hasta 400 millones como créditos de concesiones para proyectos públicos con cargo al Fondo de Ayuda al Desarrollo para la internacionalización de la empresa española, que irán destinados a adquirir bienes y servicios españoles para proyectos públicos realizados en Marruecos por compañías españolas.
Otros 100 millones con cargo al mismo fondo en forma de créditos concesionales desligados para proyectos públicos realizados en Marruecos y otros 20 millones en forma de donaciones para financiar estudios de viabilidad de los proyectos.


El voto español en las municipales

El primer ministro marroquí, Abbas el Fassi, anunció que el reino alauí está “estudiando”, y así se lo ha transmitido al Gobierno español, la posibilidad de permitir que los extranjeros residentes en el país magrebí puedan votar en las elecciones municipales, lo que requiere, indicó, una “reforma constitucional”. Así se pronunció tras ser preguntado por la propuesta del Gobierno español de permitir que los extranjeros puedan votar en las municipales, lo que exige convenios de reciprocidad con los países de origen de esos ciudadanos, para que los españoles también puedan votar en esos países. Por otra parte, Abbas el Fassi afirmó que su país es “víctima” de la inmigración como país de tránsito y subrayó que luchar contra esta situación le “cuesta mucho dinero” al reino alauí, donde hay actualmente 100.000 subsaharianos esperando a dar el salto a Europa, dijo.