Los trabajadores de la Administración pública de España en Argentina iniciaron la segunda huelga por tiempo indefinido

En el país austral están censados más de 400.000 españoles, casi una cuarta parte del total de residentes en el extranjero

Cartel de protesta ante el Consulado General de España en Buenos Aires.
Concentración ante el Consulado de España en Buenos Aires.

Las puertas de las dependencias oficiales del Gobierno español en el país austral fueron, una vez más, el escenario en el que se concentraron los trabajadores para hacer públicas sus demandas, tal como lo hicieron durante mayo y junio de este año, siendo los precursores de un reclamo que se fue extendiendo a otros países dado el retraso en la actualización de los sueldos de los empleados de la Administración española a escala global.

“Hace casi nueve años que la Administración no destina ni un solo euro a aumentar los salarios de los empleados públicos en Argentina. En ese periodo, hemos perdido un 40% de nuestro poder adquisitivo”, señalaron en un comunicado oficial, en el que explican que la masa salarial de todos los empleados públicos que integran el personal laboral de la Embajada de España asciende a 4 millones de euros, por lo que “el esfuerzo presupuestario que hay que hacer para aumentar cada punto porcentual para este colectivo es de tan sólo 40 mil euros anuales.

El reclamo de un aumento salarial ya lleva más de dos años, durante los cuales se desarrolló una huelga de 16 días ininterrumpidos que tuvieron un 90 por ciento de acatamiento en Argentina, sin embargo, los trabajadores públicos de la Administración española en el país austral resaltan que siguen siendo ignorados por el Gobierno: “No nos ofrecen ningún tipo de solución. No existimos”.   

En ese sentido, afirman que fueron manipulados cuando se convocó a una reunión de la Comisión Técnica del Personal Laboral en el Exterior el pasado 20 de junio en Madrid, con la promesa de que en dicho encuentro les ofrecerían alguna solución antes del verano español si daban fin a la huelga, promesa que subrayaron “también resultó falsa”.

Asimismo, manifestaron ser presionados “en esta nueva huelga que nos fuerzan a convocar, exigiéndonos el cumplimiento de unos servicios mínimos abusivos del 30%, cuando saben que en la anterior, con un porcentaje menor, el Fiscal de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma de Madrid consideró que la resolución que los estableció vulneraba el derecho de huelga”.

Los trabajadores también afirman ser discriminados respecto a los empleados públicos que desempeñan sus funciones dentro del territorio español: “La Administración ha ofrecido estos días a más de 2,5 millones de empleados públicos en España, un aumento salarial para los próximos 3 años que puede llegar a un 8%. Ya les aumentaron un 1% en 2016 y otro 1% en 2017. La pérdida de su poder adquisitivo desde la congelación salarial en 2009 la han cifrado en un 14%. El coste presupuestario del aumento de cada punto porcentual es de 1.140 millones de euros”, cuando, según las cifras que hicieron públicas, desde 2009 los trabajadores públicos en Argentina no han recibido ni un solo aumento a pesar de que han perdido en ese período más del 40% de su poder adquisitivo.

En lo que es un agravante a su situación, explican que además entre mayo y junio, cuando realizaron la primera huelga, perdieron el 50% de sus salarios mensuales dado que los días no trabajados fueron descontados, algo que “volverán a hacer de nuevo por los días que dure esta nueva huelga”.

Por último, resaltan la importantísima labor que los trabajadores públicos de la Administración realizan para España en Argentina: “Junto a los funcionarios, conformamos el equipo de trabajo que atiende a los más de 400.000 españoles censados en este país, casi el 25% de la población española que vive en el extranjero. Trabajamos para apoyar los negocios de cientos de empresas españolas que tratan de introducirse en el mercado argentino, para apoyar la promoción de la cultura española, del turismo hacia nuestro país y de la excelencia de nuestra oferta educativa” y concluyen: “¡Basta ya de ignorarnos! ¡Recomposición de  nuestros salarios ya! Somos empleados públicos al servicio de España y de los españoles en Argentina”.