Los secuestradores de los dos españoles en Panamá contactan con sus familias

Miguel Cortizo señaló que no se ha pedido ningún rescate y ningún grupo ha reivindicado el secuestro

El embajador especial para la Coordinación de las Relaciones con las Comunidades Españolas en Iberoamérica, Miguel Cortizo, que llegó a Panamá el viernes pasado para dedicarse exclusivamente a este caso junto con las autoridades locales, ha confirmado que “este contacto se produjo vía telefónica hace unos cinco días”.
En esa llamada a los familiares no se hizo ninguna reivindicación, ni se atribuyó el secuestro a nadie en particular y tampoco se pidió rescate alguno, según Cortizo. Añadió que éste es el primer contacto con las “compañeras” de los dos españoles secuestrados por parte de sus captores.
Cortizo, quien está en Panamá junto a otro funcionario consular del Ministerio español de Asuntos Exteriores y dos expertos de la policía española, afirmó que, de momento, “hay poca información que dar” en este caso.
El diplomático agregó “que lo que se está publicando (en los medios) es fruto de la especulación, pues no hay datos que permitan afirmar de quién es la autoría de este secuestro, ni tampoco para atribuirlo a un grupo armado determinado”.
También indicó que no hay fundamento en la noticia publicada según la cual el médico naturista fue secuestrado supuestamente por el Frente 57 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para ayudar a combatir un brote de malaria entre miembros de ese grupo guerrillero.
Expresó, además, que “aspiramos a que esto se resuelva bien con su liberación y en el menor tiempo posible”. Reconoció, sin embargo, que “es una situación complicada para los familiares de los secuestrados”. También dijo que él y las personas que le acompañan están en Panamá para hacer el análisis de la información y para reforzar al personal de la embajada, pero que “el tema lo llevan las autoridades panameñas”.
Según las autoridades panameñas los españoles podrían estar en manos de algún grupo irregular colombiano que “tomó el control de estas personas para llevarlas a territorio colombiano y entregarlas a paramilitares o guerrilla”, declararon fuentes policiales de Panamá.