Los principales clubes y centros españoles en Venezuela celebraron el Día de la Hispanidad

Juan Ramón Serrat Cuenca-Romero, embajador de España en Venezuela, presidió la recepción oficial en una sala caraqueña de festejos, recibiendo a representantes del gobierno nacional, miembros del cuerpo diplomático acreditado en el país, autoridades consulares y directivos de los centros y asociaciones españolas que funcionan en Venezuela. La Hermandad Gallega de Venezuela, que este año cumplió su 51 aniversario, también celebró su tradicional homenaje a la Hispanidad en su patio central, con ofrendas florales de sus autoridades frente al busto del libertador Simón Bolívar.
Por coincidir con el día de Nuestra Señora del Pilar, la fiesta mayor la celebró la Agrupación Aragonesa de Venezuela, iniciándose con una misa ante la Pilarica. Luego siguió un almuerzo colectivo, que este año batió record de asistencia, logrando congregar 224 comensales, entre aragoneses, descendientes y simpatizantes que residen en el país.
Bajo el lema Comparte una experiencia aragonesa, el programa de festejos en honor a la Pilarica se inició al mediodía en la Iglesia de Nuestra Señora del Pilar, en Caracas. El templo se llenó de asistentes durante la celebración de la misa solemne, el paso de los niños por el manto de la Virgen y la ofrenda floral acompañada por la interpretación de jotas tradicionales.
En la tarde tuvo lugar el Encuentro con la tierra, donde el presidente de la Agrupación Aragonesa, Antonio Pargada Gil, dio lectura al texto ‘Las tierras que nos unen’, durante el cual fue mencionando todos los pueblos y ciudades de donde proceden cada uno de quienes asistieron al evento.
También previo al almuerzo, se entregaron las distinciones Huella Aragonesa, un reconocimiento a la labor de toda una vida y manifiesto de ejemplo de lo que hicieron los aragoneses mayores en su segunda patria, Venezuela. Este año el honor correspondió a Alfredo Lesiñena Atarés y Renán Atance Gascón, dos ilustres emigrantes cuyo esfuerzo y tesón fueron ensalzados en el acto.
Por su parte, María Teresa Cubero, quien recibió dicha distinción en 2009, informó a España Exterior de las celebraciones realizadas en la ciudad de Maracay. “En la capilla del Centro Hispano la imagen de la Virgen del Pilar, aunque chiquitina, resplandecía.
La santa misa, muy emotiva, fue oficiada por el Padre Odilio, como otros años. Después, todos los asistentes, a una sola voz, recitaron el Himno de la Virgen del Pilar, a la cual todos los asistentes le llevaron claveles, para luego pasear su imagen rezando y cantando hasta la parte central del Centro Hispano Venezolano.