Fueron solamente tres representantes de los partidos políticos con presencia en las Cortes los que acudieron al tercer pleno del quinto mandato del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE). En concreto, el diputado por Sevilla del PSOE, Rafael Herrera, ex consejero de Trabajo en Buenos Aires; la diputada por A Coruña del PP, Belén Do Campo, y el diputado por Gerona de Convergencia i Unió (CiU), Jordi Xuclá.
Mientras el diputado socialista hizo un repaso a su actuación como consejero de Trabajo en Buenos Aires y a las actuaciones llevadas a cabo por la Secretaría de Estado de Inmigración y Emigración, la diputada ‘popular’ expuso las propuestas de su partido en materia de emigración, como la implantación del voto en urna en el exterior, la ampliación de las pensiones de ancianidad, la elaboración de una ley de nacionalidad, la solución del problema del SOVI, la aplicación de la ley de dependencia a los residentes en el extranjero y la creación de nuevas Aulas de Lengua y Cultura (ALCE), entre otras.
Por su parte, el representante de CiU, Jordi Xuclá, realizó una intervención un tanto sorprendente para muchos consejeros ya que se centró en la ampliación a los inmigrantes en España del derecho a voto en los comicios municipales y la consiguiente reciprocidad que afectará a los españoles residentes en los países con los que se llegue a acuerdos en esta materia. Además, señaló que el sistema de voto de los españoles en el exterior debe mejorarse y animó a los consejeros a realizar propuestas al respecto. Los miembros del CGCEE le indicaron que llevaban años haciéndolas y que incluso habían enviado una carta, todavía sin respuesta, al presidente del Congreso para que su voz fuese escuchada en la subcomisión que está estudiando la reforma de la Ley electoral. Xuclá se limitó a señalar que deberían enviarla al presidente de la subcomisión, Alfonso Guerra. Eso sí, el diputado de CiU animó al pleno del CGCEE a tener una relación más fluida con el Congreso.
En cuanto a la diputada del Partido Popular, Belén Do Campo, algunos consejeros le recriminaron el hecho de que todas las propuestas que expuso las podían haber puesto en marcha cuando gobernó el PP y no lo hicieron.
Do Campo insistió en la necesidad de reformar la ley electoral y en su intervención se refirió al ofrecimiento que realizó el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de llegar a un pacto para que dicha reforma pueda entrar en vigor en las elecciones de 2011.
Sobre nacionalidad, también se remitió al programa electoral del PP de Galicia en el que se apostaba por la elaboración de una Ley de Nacionalidad.
Los consejeros exigen mayor implicación de los partidos
Tras la intervención de los representantes de los partidos les tocó el turno a los miembros del CGCEE. Los consejeros exigieron a los políticos un mayor compromiso e implicación en la resolución de sus demandas.
Por otro lado, el secretario xeral de Emigración de la Xunta de Galicia, Santiago Camba, replicó con severidad las alusiones del representante del PSOE, Rafael Herrera, a las miles de peticiones de pensión asistencial que se encontraron en la Consejería de Trabajo de Buenos Aires tras el cambio de gobierno en 2004.
Camba criticó que se volviese sobre ese tema sin estar presente, para poder defenderse, la persona que ocupaba dicha consejería hace cinco años, Norberto Mansilla.
Señaló que en total fueron 8.700 solicitudes pendientes de ciertos trámites y documentación las que se quedaron en Buenos Aires. Y añadió que tardaron 6 meses en remitirse a Madrid y que la gran mayoría no cobraron la prestación hasta 2 años después y sin los atrasos acumulados.