Los partidos políticos pretenden ahora que los ciudadanos españoles en el exterior voten en urna y no participen en las elecciones municipales

Los emigrantes mantienen el derecho a voto en los comicios generales y autonómicos

El presidente de la Subcomisión charla con otros miembros del órgano.

La intención de la mayoría de los partidos políticos es que los ciudadanos españoles en el exterior no voten en las elecciones municipales y el procedimiento de participación de los emigrantes se asimile lo máximo posible al de los residentes en España: voto rogado por correo o en urna. Este es el contenido del acuerdo que alcanzaron los partidos en la última reunión, celebrada en la tarde del día 28 de abril, de la Subcomisión del Congreso que estudia la reforma de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG), según anunció su presidente, Alfonso Guerra.

De todas formas, los miembros de la Subcomisión llegaron a este acuerdo de base pero no concretaron la manera de llevarlo a la práctica; por ejemplo, en el caso del voto por correo, donde no detallaron si el procedimiento sería el mismo que regía hasta ahora en las elecciones municipales.

Aunque los partidos confían en que el nuevo proceso de votación esté listo para las elecciones autonómicas y municipales previstas para mayo de 2011, la tramitación en las Cortes será larga y compleja, con lo que no se pueden descartar nuevos aplazamientos. De hecho, aún queda la ratificación del acuerdo por la Comisión Constitucional, la elaboración de una propuesta de reforma de la Ley y su paso posterior por el pleno del Congreso de los Diputados y del Senado.

El titular de la Subcomisión apostó por que los españoles que residen en el exterior sí podrán votar en urna en 2011 y aclaró que en las últimas semanas “se han lanzado muchas teorías desde el periodismo y no coincidían con aquello en lo que estábamos trabajando”.

Guerra destacó que la reforma electoral en relación al CERA le “ha llevado muchísimo tiempo” a la subcomisión, que finalmente llegó a un acuerdo muy amplio según el cual “los residentes en el exterior tendrá derecho de voto en las elecciones para el Congreso de los Diputados, también para el Senado, las elecciones autonómicas, las europeas y para aquellos referendos que sean convocados por el Gobierno de la Nación. Sin embargo, no tendrán ese derecho en las municipales, según aconsejó el Consejo de Estado, dado que la legislación es muy clara en cuanto a que los alcaldes los deben elegir los vecinos y ellos no son efectivamente vecinos”.

En lo referente a la posible creación de una circunscripción exterior, Guerra aclaró que no habrá cambios en ese sentido, aunque sí en cuanto al sistema de voto ya que “podrá ser en urna en los consulados o a través del correo. Esta había sido siembre una aspiración de los españoles en el exterior”. La votación en urna se realizaría durante los tres últimos días de campaña y tanto para poder votar en urna como por correo será preciso identificarse con el carnet de identidad o el pasaporte y adjuntar también la certificación del CERA. “Así, ya no será posible que nadie vote por nadie”, dijo Guerra.

El presidente de la subcomisión destacó que se llegó a “un acuerdo muy mayoritario con algunas excepciones parciales”, como ocurrió con la representante del Grupo Mixto, Ana Oramas de Coalición Canaria, que personalmente no coincidía con la cuestión de las municipales, aunque su grupo sí. También Izquierda Unida, que en una reunión anterior había dado su conformidad, cambió de opinión y no apoyó el tema municipal pero sí a todas las demás propuestas.

En relación al voto en urna, el portavoz del Partido Popular en la Subcomisión, José Antonio Bermúdez de Castro, explicó que para él se trata de una reforma “histórica” y detalló que no habrá una jornada electoral, “pero sí un voto anticipado en urna con representantes de los partidos. Esos votos vendrán a España por valija electoral”. El voto por correo se mantendrá para aquellos que no han podido desplazarse al consulado. “Creo que cerraremos en la próxima reunión que la administración llegue a convenios con otros correos de otros países para garantizar que no haya una saca que se quede por el camino”, amplió.

El diputado del PP destacó que la subcomisión valoró muchos informes. “Teníamos que buscar un procedimiento que garantizara la personalidad, la efectividad y la transparencia de quien ejerce el derecho al sufragio. Creo que hemos llegado a un buen acuerdo y se trata justamente de garantizar la personalidad, para que sea el propio elector el que inicie el ejercicio de ese derecho, que nadie pueda suplantar ese voto y que sea la administración electoral la que remita la hoja informativa del voto”.

Bermúdez de Castro resaltó un tema “en el que todos los grupos parlamentarios coincidíamos cuando iniciamos el trabajo de esta subcomisión: el voto de nuestros compatriotas en el exterior no puede estar siempre bajo sospecha”. “No es posible continuar, elección tras elección, siempre con informaciones cruzadas o si pudo haber manipulación. No lo merecen nuestros compatriotas en el exterior”, agregó.

En cuanto a la eliminación de la participación de los ciudadanos en el exterior en las municipales, Bermúdez de Castro señaló que “es verdad que hace años, cuando con nuestra incipiente democracia se concedió el voto en municipales, muchos de ellos eran personas que habían nacido en España, que habían vivido aquí y que por determinadas circunstancias habían tenido que marchar. Dentro de poco tiempo, el censo de 1,3 millones de españoles en el exterior será de 1,7 millones como consecuencia de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica, pero muchos de ellos no han nacido ni vivido aquí y -como dice el Consejo de Estado- no hay realmente una relación de vecindad”.