El último padrón a 1 de enero de 2006, contabilizó una población total de 44.709.000 de habitantes, de los que 4.145.000 son personas extranjeras. Con respecto al 2005, el número de extranjeros inscritos en los padrones creció en unas 415.000 personas y supone una variación relativa anual del 11,1 por ciento. En 2001, los extranjeros inscritos en los padrones giraban en torno a 1.371.000 (3,3 por ciento de la población total residente en España); en el 2002 se situaron en 1.978.000 (4,7 por ciento); en 2003 eran 2.664.000 (6,2 por ciento); en 2004 sumaron 3.034.000 (siete por ciento) y en 2005 ascendían a 3.730.000 (8,5 por ciento).
Los datos provisionales suministrados por el Instituto Nacional de Estadística también reflejan que las tarjetas de residencia concedidas a extranjeros sumaron 2.739.000 en 2006, frente a las 1.977.000 del año precedente. En tan sólo seis años, el porcentaje de residentes extranjeros pasó del 2,3 por ciento de 2000 (924.000 personas) al 9,3 por ciento de este último ejercicio (4.145.000).
Sobre la distribución geográfica, Cataluña concentra el 22 por ciento del total de población extranjera; Madrid (19,3 por ciento); la Comunidad Valenciana (16,1 por ciento); Andalucía (11,8 por ciento ), Canarias (5,6 por ciento); Murcia (4,6 por ciento), Baleares (cuatro por ciento), Castilla-La Mancha (3,2 por ciento); Castilla y León (2,6 por ciento), Aragón (2,5 por ciento), País Vasco (2,1por ciento), Galicia (1,8 por ciento), Navarra (1,3 por ciento), La Rioja (0,8 por ciento), Asturias y Extremadura (0,7 por ciento cada una), Cantabria (0,6 por ciento) y Ceuta y Melilla (0,1 por ciento). Por sexos, siempre según los datos provisionales del INE, el 53,5 por ciento de los extranjeros inscritos en 2006 son varones y el resto (46,5 por ciento) son mujeres. En 1999, las mujeres alcanzaban un 49,4 por ciento frente a un 50,7 por ciento de los hombres. La edad media de los foráneos se sitúa en 33 años, frente a los 41 años de promedio de los españoles, aunque en el caso de los ciudadanos originarios de África desciende a los 28,8 años y sube ligeramente entre los nacionales de América Central y del Sur, 30,7 años de media.
Los mayores porcentajes de extranjeros sobre el total de residentes por provincia se registran en Alicante (20,1 por ciento); Almería (17,4 por ciento); Gerona (16,9 por ciento); Baleares (16,8 por ciento); Murcia (13,8 por ciento); Málaga (13,7 por ciento); Tarragona (13,6 por ciento) y Madrid (13,3 por ciento).