Bono, que calificó de “incidente menor” lo sucedido en los hechos en los que participaron los soldados españoles, informó de que éstos protegieron un edificio de la autoridad regional de Herat ante una concentración de protesta. El ministro declaró que España envió una compañía de actuación, compuesta por un total de 25 soldados, para colaborar en la protección de esa sede, tras ser solicitada la ayuda por parte de las autoridades locales.
Según concretó el ministro, el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general Félix Sanz Roldán, le indicó que no hubo “ninguna incidencia mínima de ser reseñada”. Por otra parte, el portavoz del comando italiano, Ricardo Cristoni, señaló que soldados españoles de la Fuerza de Reacción Rápida destinadas en Afganistán intervinieron para dispersar a los manifestantes que tiraban piedras contra la base de las tropas italianas ‘Camp Vianini’ en Herat. Por su parte, la OTAN afirmó que la situación se calmó en Afganistán tras las manifestaciones. También destacó el autocontrol de las tropas durante los incidentes registrados en el noroeste de Afganistán.
Queman la bandera de España
Por otra parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, condenó la quema de la bandera española en la localidad iraquí de Kut e instó al diálogo y la comprensión en el seno de la comunidad internacional para rebajar la tensión. “Hay que condenar todos los actos de violencia, incluida la quema de la bandera”, señaló.