Las entidades gallegas en el exterior reciben 4,5 millones de euros en subvenciones de la Xunta

También aparecen publicadas las ayudas para la mejora de infraestructuras.
La finalidad de las ayudas, que se resuelven a través de dos vías de actuación, abarcan en el caso de la primera de ellas, la prestación de servicios asistenciales, las actividades culturales y asociativas, las acciones informativas y los proyectos promovidos por la juventud. La cuantía de estos programas asciende a 2 millones de euros.
Las subvenciones para las actuaciones en materia de atención sociosanitaria (cubriendo cuotas de personas en situación de paro o desprotegidas, financiando el funcionamiento de centros de día o viviendas compartidas, asistencia domiciliaria, etc.) asciende a 653.000 euros.
Estas ayudas están dirigidas a los gallegos residentes en Argentina, Venezuela, Uruguay, Brasil, Cuba y Portugal. El objetivo de este programa es facilitar el acceso a servicios sanitarios, asistenciales y residencias de los emigrantes de origen gallego que necesiten o carezcan de la suficiente cobertura y de medios económicos para afrontar sus costes.
En este capítulo, destacan las líneas de ayuda activadas a favor de la Fundación Galicia Salud, por valor de 300.000 euros, para contribuir a optimizar la asistencia del Hospital Gallego de Buenos Aires; del Centro Gallego para cubrir (hasta 80.000 euros) cuotas de socios; de la Casa Galicia de Montevideo (31.000 euros); de la Hermandad Gallega de Venezuela (35.000 euros); de la Real Sociedad Española de Beneficencia de Salvador de Bahía (20.000 euros), o de la Federación de Sociedades Gallegas de Cuba (8.000 euros).
Por otra parte, las ayudas para la realización de proyectos formativos, culturales y actividades asociativas, capítulo donde tienen cabida los proyectos innovadores, cursos, seminarios, actos conmemorativos, o tareas de información, ascienden 785.000 euros y de ellas se beneficiarán más de cien entidades del exterior. Las acciones informativas, con un presupuesto de 184.000 euros, y los proyectos creativos, formativos, de participación e intercambio promovidos por la juventud gallega, con una cuantía de 357.000 euros, completan los programas incluidos en la primera de las resoluciones reguladoras de las subvenciones a las comunidades de la emigración.
Infraestructuras
Una segunda vía para canalizar las líneas de ayuda es la que contempla el apoyo de la Secretaría Xeral de Emigración a aquellas acciones tendentes a subvencionar los gastos realizados por las entidades gallegas en Infraestructuras, ya a través de programas destinados a la rehabilitación de instalaciones y nuevos proyectos, a la mejora de las dotaciones y equipamientos, ya al acondicionamiento y dotación de bibliotecas. La cuantía conjunta de estas actuaciones alcanza los 2,5 millones de euros.
El departamento que dirige Manuel Luís Rodríguez dedica al programa para rehabilitar instalaciones o para la promoción de nuevos proyectos (preferentemente de carácter socioasistencial, como centros de día o centros hospitalarios) una partida de 780.745 euros, desde la que se actuará en más de ciento diez espacios.
En el apartado de nuevos proyectos destaca la ayuda de 150.000 euros otorgada al Centro Galicia de Buenos Aires y las subvenciones concedidas a la Casa de Galicia de Montevideo y al Centro Gallego de Buenos Aires de 140.000 euros cada una. Además, la Real Sociedad Española de Beneficencia de Salvador de Bahía y el Centro Gallego de Londres recibirán 80.000 euros cada uno.
Las ayudas a entidades asociativas de los emigrantes gallegos para la mejora de dotaciones y equipamientos, y las subvenciones para el acondicionamiento y la renovación de fondos de las bibliotecas en el exterior, alcanzan los 906.000 y los 150.000 euros respectivamente.


En 2007 se pondrá en marcha un centro de día en Río de Janeiro

La Secretaría Xeral de Emigración apostó a lo largo de 2006 por la puesta en marcha, en algunos casos en coordinación con el Gobierno central, de tres nuevos centros de día que tiendan a consolidar la red de este tipo de entidades en la Galicia exterior. Caracas y Valencia en Venezuela, y Uruguay en Montevideo, son las ciudades en las que se emplazan los nuevos centros, que habilitan 45 plazas en el caso venezolano y 32 en el uruguayo.
Según la propia Secretaría, el mapa de necesidades y demandas que se constata en la emigración, en parte desencadenado por los perfiles generacionales predominantes en la Galicia exterior, obligan al Gobierno gallego a modificar la orientación de sus políticas, que desde la necesidad de garantizar el mejor rendimiento de la función asistencial, deben completarse con una visión del gallego en el exterior como ciudadano activo e invertido de derechos tendentes a la equiparación de los ciudadanos residentes en Galicia. Este factor, indica el departamento que dirige Manuel Luis Rodríguez, justifica la apuesta por la prestación de servicios a través de centros de día que buscan trasladar el modelo del Estado del Bienestar a la emigración, donde la calidad de vida de los gallegos que residen en el exterior se erige en objetivo prioritario del Plan Estratégico de la Emigración.
La Secretaría Xeral de Emigración intensificará en 2007 sus actuaciones en este sentido. En concreto, el secretario xeral de Emigración, Manuel Luís Rodríguez, espera que el próximo año sea posible disponer de nuevos centros de día, entre otras localidades, en Río de Janeiro (Brasil). El departamento de Emigración está estudiando la idoneidad de trasladar a Europa el modelo de centros de día que actualmente opera en América.
Los nuevos centros programados para 2007 van a ser complementados con la ampliación de plazas en entidades ya existentes en las que se prestan servicios de atención a personas mayores.
La atención profesionalizada y la gestión racional y responsable de los recursos públicos motivan la apuesta de la Secretaría Xeral de Emigración por un nuevo modelo de atención a los ciudadanos gallegos, que pasa por promover la concertación de plazas para gallegos y gallegas de la tercera edad en situación de vulnerabilidad y riesgo social en centros geriátricos pertenecientes a los países de acogida y que avalen una contrastada calidad de sus servicios.
El fomento de este nuevo modelo de atención al mayor, que correría paralelo a la gestión de los centros propios, parte de la eficacia del aprovechamiento de entidades ya existentes a la hora de garantizar la prestación de servicios en núcleos de población alejados de las grandes urbes en las que se concentra la mayor población de gallegos y gallegas y en los que, por razones de dispersión de población, los costes derivados de disponer de centros propios hacen inviable la oferta de atención.