Las colectividades españolas festejaron San Juan con hogueras en Montevideo

Vascos, catalanes, asturianos y gallegos celebraron una de las fiestas más tradicionales

Actuación de 'Os Williamns' en el Centro Valle Miñor.

La noche de San Juan, una de las más frías del invierno montevideano, llevó a vascos, catalanes, asturianos y gallegos a festejar al santo en una de las fiestas más tradicionales que se arraigara en esta zona ya en la época de la colonia española.

Como todos los 23 de junio a la noche, el Casal Catalá prepara una gran hoguera con casi media tonelada de leña que arde mientras se disfruta comida catalana, bailan las tradiciones de su tierra y luego cuando el fuego lo permite, las mujeres solteras atraviesan las llamas para casarse prontamente.

Otra de idénticas características se vivió en la Ciudad Vieja de Montevideo, donde un grupo de vascos llevaron adelante esta ceremonia con la presencia de varios transeúntes que se arrimaron a divertirse un poco.

Mientras que ya en un lugar cerrado, fue el Patronato de la Cultura Gallega el que organizó una charla que además contó con la expresión de cuentos y tradiciones que permitían observar cómo se disfruta en Galicia esta fiesta de San Juan y las diferencias que se tienen con Montevideo. También los asturianos realizaron la típica fiesta en su sede del Centro Asturiano Casa de Asturias del Prado, donde con bailes tradicionales todo fue alegría alrededor de la hoguera montada en el fondo de la institución.

Mientras que allá las hogueras son en las playas, aquí se hacen en lugares protegidos del viento aunque también en el campo uruguayo se practica esta ceremonia de la hoguera, con todas sus tradiciones, usando generalmente los sarmientos ya que hace pocas semanas se realizó la poda de los viñedos.

El viernes fueron los jóvenes que están recaudando fondos para concurrir con su música y sus bailes al año Xacobeo, los que montaron una espectacular gala para celebrar San Juan, que contó con la participación de Os Williams y Os Trapalleiros, asimismo todo el cuerpo de baile infantil y adolescente del Club Valle Miñor, donde sus autoridades prestaron gratuitamente la sede para poder recaudar fondos.