La Xunta licitará la construcción de 805 nuevos pisos protegidos en 2007

La cifra es un 30% mayor que la de este año y la más alta de la última década

Así lo afirmó la conselleira Teresa Taboas durante la presentación de los presupuestos de su departamento para 2007.
Táboas añadió que las VPP licitadas el año que viene supondrán un incremento del 29% frente a las 621 que se habrán licitado a final de 2006.
Las partidas totales de Vivenda sumarán para el próximo ejercio 222,1 millones de euros -un 7,6% más que en 2006-, si bien a esta cantidad habrá que añadir los 206,7 millones de las cuatro sociedades de gestión -conocidas como 'xestures'-, cuyo incremento en relación a 2006 será del 20,77%.
Según explicó Taboas, estas cifras servirán para dar cobertura a tres grandes líneas de actuación, como son favorecer el acceso a la vivienda a las personas con rentas medias y bajas, tanto en régimen de compra como en alquiler; rehabilitar el patrimonio arquitectónico existente para demostrar que “no es necesario seguir invadiendo terreno”; así como crear suelo empresarial con criterios de demanda y de equilibrio territorial.
Las medidas para favorecer el acceso a la vivienda en compra o alquiler implicarán, según la Consellería, ayudas directas a 2.950 familias, incentivos para urbanizar 1.749 viviendas y para construir 400 con destino a alquiler y ayudas para rehabilitar o reconstruir otras 3.488 viviendas.


Vivenda exigirá a los promotores ceder hasta un 40% de suelo

La Consellería de Vivenda aprovechará la reforma de la Lei do Solo para elevar hasta un 40% el cupo que los promotores deben reservar a la construcción de pisos protegidos. La legislación actual fija que este porcentaje debe ser del 20%, aunque, según explicó la conselleira Teresa Táboas, no se preveía la aplicación de esta norma hasta enero de 2007. Su intención es que en aquellos municipios donde exista una gran demanda de vivienda protegida esta reserva se duplique, de manera que de cada 100 pisos que un promotor construya en un solar al menos 40 han de ser a precios limitados y subvencionables por la Administración autonómica. “Poner vivienda protegida en el mercado es la única manera de evitar que se sigan incrementando los precios de la vivienda libre”, aseguró la conselleira. Para ello, sin embargo, se necesita disponer de más suelo. “Es nuestra materia prima”, dijo.