La Xunta incluye en los Presupuestos de 2013 un Fondo de Crecimiento dotado con 386 millones de euros

Las cuentas incluirán un Fondo de Crecimiento dotado con 386 millones de euros con el objetivo de sentar las bases en los primeros dos ejercicios de la legislatura que permitan que la economía gallega vuelva a crecer en la segunda parte. Además de la importante cuantía, tendrá una vertiente cualitativa, ya que será coherente con el Plan Estratégico, mejorará la coordinación de políticas y garantizará una mayor eficacia en las inversiones que se realicen, todo eso con el objetivo de ser un instrumento que incentive la reactivación económica.
Entre las prioridades: retener y atraer talento, aprovechar las potencialidades de la Comunidad, desarrollar nuevos productos y servicios, ayudar a hacer más compatibles la oferta y la demanda laborales, favorecer la creación de empresas y su acceso a los mercados y a la financiación, reforzar la internacionalización de las empresas gallegas, darle mayor importancia y modernizar el tejido industrial, fomentar el empleo de las TIC en todos los sectores y ayudar al reequilibrio territorial.
Solvencia con menos gasto
El gasto no financiero de la Xunta será de 8.479 millones de euros, ligeramente por debajo del techo aprobado el pasado mes de agosto y un 2,5% inferior a la capacidad de gasto de este año, una caída que se debe en gran medida al hecho de que Galicia continuará disminuyendo su déficit y se endeudará en 2013 en 464 millones de euros menos que en 2012. Galicia fue la tercera Comunidad que menos incrementó su endeudamiento durante la época de crisis, desde finales del año 2007.
Las prioridades de las cuentas serán continuar un ejercicio más garantizando la solvencia de la Hacienda autonómica y el mantenimiento de la prestación de los servicios públicos esenciales. El Gobierno autonómico, con 2.100 millones de euros menos de capacidad de gasto, en el nivel del año 2006, tiene que ser capaz de prestar los servicios públicos que los gallegos necesitarán en 2013.
Y liderará a las comunidades en esfuerzo inversor, tal y como hizo este ejercicio, según  los últimos datos comparativos dado a conocer por el Gobierno central sobre la ejecución presupuestaria.
De cara a 2013, Galicia también prevé tener un mejor comportamiento de lo previsto. Así, el Ejecutivo estima que el PIB gallego del próximo año se sitúe en el -0,9%, dos décimas mejor que lo que prevén los organismos internacionales y privados para el conjunto de España. Sobre la tasa de paro, la Comunidad gallega mantendrá diferenciales positivos superiores a los cuatro puntos.
En materia tributaria, el Gobierno gallego adopta la decisión de disminuir una serie de impuestos de forma selectiva. Son varios incentivos para la capacidad emprendedora de aquellos que quieran invertir en Galicia: dos deducciones del Impuesto de la Renta de las personas físicas; dos deducciones del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados y dos deducciones del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Por ejemplo, el Gobieno autonómico continúa la línea de la anterior legislatura de aplicar rebajas selectivas en los impuestos sobre la vivienda con el fin de favorecer su adquisición por parte de los que más dificultades tienen y más lo necesitan. Asimismo, la Xunta pone en marcha nuevas deducciones con el fin de fomentar el emprendimiento.
En el IRPF se incluye una deducción del 20% de las cantidades invertidas (con un límite de deducción de 4.000 euros) en la creación de nuevas empresas o la ampliación de la actividad de empresas de reciente creación. Igual se duplica la deducción (hasta los 8.000 euros) para las personas que inviertan en acciones o participaciones sociales de nuevas entidades o de reciente creación.
Anticipo voluntario
Por otra parte, el Consello de la Xunta también dio luz verde al decreto de prórroga de los actuales presupuestos, una medida ya prevista en la ley, para disponer de cuentas públicas mientras que el Parlamento no apruebe las definitivas para 2013. En este texto se incluye la posibilidad de que el Ejecutivo autonómico adelante la mitad de la paga extra de junio a la próxima nómina correspondiente al mes de enero para aquellos empleados públicos que así lo soliciten.
Este anticipo es una medida voluntaria, legal y que busca compensar de alguna manera la pérdida de poder adquisitivo de los empleados públicos en esta época como consecuencia de la eliminación de la paga extra de Navidad por parte del Gobierno central.