No obstante, el incremento en el número de desempleados no se debió a destrucción de empleo, sino al elevado aumento del número de activos, 641.800 personas en los últimos doce meses, que no pudo ser compensado por el notable incremento interanual del número de ocupados, 615.000. El número total de asalariados ascendió a 16.869.800, con un aumento anual de 503.900 personas. De éstas, 776.700 son asalariados con contrato indefinido, lo que supone un incremento anual del 7,26 por ciento, mientras que el número de asalariados con contrato temporal se redujo en 272.800 personas (-4,82 por ciento anual).
Así, la tasa de temporalidad se sitúa en el 31,94 por ciento, 2,7 puntos porcentuales menos que hace un año, cuando se situaba en el 34,6 por cieto. No obstante, en tasa intertrimestral, tal y como viene siendo habitual en los terceros trimestres del año por la estacionalidad de determinados empleos, la tasa de temporalidad ha sufrido un pequeño repunte de 0,09 puntos porcentuales, siendo el menor incremento de un tercer trimestre desde 2002.
Por el lado de la oferta, la tasa de actividad total de la población de dieciséis años o más sube 0,24 puntos porcentuales hasta el 59,10 por ciento en el tercer trimestre, con un crecimiento anual del 0,26 por ciento. La de varones fue del 69,61 por ciento y la de las mujeres del 48,98 por cieto. La tasa de actividad de la población de 16-64 años se sitúa en el 72,83 por ciento.