La llegada del AVE a Barcelona podría retrasarse tras los nuevos cortes en la red ferroviaria

Un deslizamiento de tierras en las obras de alta velocidad provocan el cierre temporal de varias líneas de cercanías

Esta nueva incidencia ya ha hecho dudar a los responsables políticos de que el AVE pueda llegar en el plazo previsto por el Gobierno, el próximo 21 de diciembre.
El incidente más grave registrado hasta ahora en las obras del AVE en Barcelona obligó a cortar dos líneas de Cercanías y cuestiona aún más que se pueda mantener el calendario de inauguración de la llegada del tren de alta velocidad a la capital catalana.
El deslizamiento, el pasado 20 de octubre, de un muro-pantalla en el túnel de los Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña (FGC) en el Gornal, próximo a las obras del AVE, provocó la interrupción de las líneas de cercanías C-2 y C-10 entre Bellvitge y Sants, y del servicio de Ferrocarriles entre la plaza España y L'Hospitalet, con el consiguiente caos y retrasos para los más de 160.000 usuarios que usan diariamente este medio de transporte para desplazarse a la Ciudad Condal.
El cierre de las dos líneas durará al menos una semana, mientras que la reestructuración en la red ferroviaria afectada durará “un mes largo o dos”, según dijo el conseller de Política territorial, Joaquím Nadal.
Para tratar de atenuar las consecuencias de este nuevo problema, se puso en marcha un dispositivo con 220 autocares como alternativa a los trenes, desde el aeropuerto de El Prat, y para cubrir el tramo de las vías que quedaron inutilizadas y que une Gavà con la estación de Sants.
Al deslizamiento de tierras hay que sumar seis socavones aparecidos en la zona de las obras del AVE en las últimas semanas. El último y mas grave incidente provocó una reunión de urgencia de los miembros del Centro Coordinador de la Operación Ferroviaria Barcelona 2007 (Cecof), el día 20.
El secretario de Estado de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Víctor Morlán, que compareció en rueda de prensa tras la reunión, no pudo garantizar que se pueda mantener el calendario de inauguración de la llegada del AVE a Barcelona, fijado para el 21 de diciembre.
En parecidos términos se manifestó el president de la Generalitat, José Montilla, quien durante una visita a Cervera (Lleida), declaró que la seguridad de los viajeros de Renfe debe primar sobre las fechas previstas para hacer llegar el AVE a Barcelona. “Si la inauguración se puede hacer el 21 de diciembre bien y, si no, ya se hará en otro momento”, indicó el dirigente socialista.
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, no quiso hablar sobre el futuro del AVE a la Ciudad Condal, y se limitó a decir que la única que prisa debía ser dar el mejor servicio cuanto antes a los usuarios.
A pesar de la flota de autobuses existente para sustituir las dos líneas de cercanías inutilizadas, el caos y los retrasos se apoderaron el lunes 22 de octubre del servicio, desde primeras horas de la mañana. También se produjeron largas colas en las carreteras de acceso a Barcelona, en medio de unas amplias medidas de seguridad desplegadas en estaciones y en el aeropuerto de El Prat.
El Ayuntamiento de Barcelona informó de que la circulación en el interior de la ciudad había aumentado un 10% respecto a otros lunes.


La oposición critica la situación y exige explicaciones

El último problema surgido en la red ferroviaria de Barcelona debido a las obras del AVE ha provocado la indignación entre los partidos de la oposición.
El presidente de CiU, Artur Mas, calificó de “auténtica vergüenza” la situación de las obras del AVE, mientras que el máximo dirigente del PP en Cataluña, Daniel Sirera, exigió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que “ponga freno” a la llegada del AVE a Barcelona tras el incidente ocurrido en el Gornal.
El PP anunció la presentación de comparecencia urgente del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Congreso de los Diputados para que explique qué medidas va a adoptar para acabar con la “pesadilla interminable” y el “caos” de las infraestructuras en Cataluña.
El presidente del PP, Mariano Rajoy, también habló sobre la cuestión para acusar a las administraciones de estar “abofeteando” a los catalanes con los problemas de infraestructuras y calificó los últimos hechos de “verdaderamente lamentables”.