La Junta vuelve a bajar impuestos a todos los ciudadanos con la reducción del tramo autonómico del IRPF

Suprime el tributo sobre Hidrocarburos y amplía los beneficios fiscales a 69 entidades locales menores

La consejera Pilar del Olmo explica las medidas ante la vicepresidenta Rosa Valdeón.

En cumplimiento de los compromisos anunciados por el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, la norma incluye una nueva bajada de tributos para todos los ciudadanos mediante la disminución del tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y la eliminación íntegra de ese gravamen en el Impuesto sobre Hidrocarburos. Y como novedad, se redefine el concepto de núcleo rural para incluir a 69 entidades locales menores, de modo que sus habitantes accedan a los beneficios fiscales por adquisición o rehabilitación de la vivienda habitual.
La propuesta de modificación del IRPF, que adapta la tarifa autonómica a la estatal, mantiene los cinco tramos en los que se estructura el impuesto, pero con cambios sustanciales. Así, el primero de ellos -que va de los 0 a los 12.450 euros- se gravaría con el 9,5% a partir del 1 de enero de 2016, en lugar de con el 10% vigente. La intención es que la bajada también se note en el segundo tramo de la tarifa, al que se aplica un tipo del 12% y va de los 12.450 a los 17.707,2 euros. Para ello el límite superior se elevaría hasta los 20.200 euros, lo que implica incluir a un mayor número de contribuyentes que hasta ahora pagaban el 14% por la parte de la base imponible que iba de los 17.707,2 hasta los 20.200 euros.
Otras comunidades
Por último, para el tercer tramo se plantea algo similar, de manera que el techo pase de los 33.007,2 actuales a 35.200. Esto supondría aplicar un tipo del 14% a la base imponible comprendida entre ambas cantidades, frente al 18,5% de ahora. Cabe recordar que durante la crisis, y a diferencia de lo ocurrido en otras comunidades, el Ejecutivo de Castilla y León no elevó la tarifa autonómica del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y en cuanto ha observado una evolución positiva de la situación económica ha decidido rebajarlo, como hizo en 2015 y en lo que insiste en 2016 con el fin de que los ciudadanos recuperen una parte de los esfuerzos que han realizado en estos años.
En la misma línea, el Anteproyecto recoge una importante modificación en el Impuesto sobre Hidrocarburos, de titularidad estatal pero que tiene dos tramos: uno que fija el Gobierno de España y otro que autorizó a establecer a las comunidades dentro del modelo de financiación, para que pudieran financiar el gasto sanitario. De hecho, 12 de ellas lo implantaron -la última fue Castilla y León, en marzo de 2012-. La Junta lo recortó en un tercio en 2015 y propone ahora la supresión íntegra de la tarifa autonómica desde el 1 de enero de 2016, es decir, que los ciudadanos dejen de pagar 1,6 céntimos adicionales por litro de gasolina, gasóleo o queroseno, así como 0,07 céntimos por cada litro de fuelóleo. Al sector del transporte no le afecta, puesto que ya se les devuelve el 100%.
Apoyo a familias
Otro cambio de calado es la redefinición del concepto de núcleo rural, a los efectos a aplicar los beneficios tributarios de la Comunidad por adquisición o rehabilitación de la vivienda habitual. Así, se deja de considerar el municipio para tomar como referencia las entidades locales menores, lo que abre la posibilidad de acceder a esas ventajas a los habitantes de 69 pueblos en los que residen alrededor de 27.000 personas.
El apoyo a las familias es una de las prioridades del Gobierno de Herrera, junto con la creación y consolidación del empleo. De ahí que la Junta haya optado un ejercicio más por mantener el extenso catálogo de 50 beneficios tributarios del que disfrutan los castellanos y leoneses, lo que se traduce en un relevante ahorro.
Finalmente, el articulado del Anteproyecto de Ley de Medidas Tributarias para 2016 no añade ninguna tasa de la Comunidad nueva, pero se modifican seis e introduce cambios en ocho leyes.