La Generalitat de Cataluña estudia ampliar los servicios que ofrece a los residentes en el exterior

Una propuesta que el departamento que dirige Josep Lluís Carod-Rovira estudia introducir en la reforma de la Ley de Comunidades Catalanas en el Exterior (CCE), los conocidos como “casals catalanes”.
El propio Carod anunció la reforma de este texto, que estará lista antes de final de año y tiene como objetivo “revisar y modernizar” la relación de la Generalitat con la red de comunidades catalanas o “casals” en el exterior. Un total de 114 entidades extendidas por casi 40 países del mundo, creadas por las propias comunidades catalanas en el exterior y que en los últimos años recibieron puntual apoyo de los gobiernos de la Generalitat, tanto con CiU como con el tripartito.
El objetivo inicial era ampliar el abanico de servicios prestados a esos “casals”, especialmente en el ámbito cultural en el que se mueven la mayor parte de sus actividades. Sin embargo, la Secretaría de Relaciones Exteriores de la Generalitat se plantea la posibilidad de extender esos servicios a todos los catalanes residentes en el exterior. De momento, se trata de un proyecto en estudio, que la Secretaría ha trasladado al resto de los departamentos del Govern para que estudien qué servicios se pueden ofrecer.
La intención del vicepresidente de la Generalitat es que en este mismo período de sesiones ya se disponga del anteproyecto de la nueva ley, y que a partir de entonces el gobierno pueda aprobar el proyecto y tramitarlo en el Parlament “con el máximo consenso posible”. La Ley actual regula la relación de la Generalitat con esas 114 entidades. Aprobada en 1996, la Ley de las CCE creo el registro de “casals” en el exterior, un registro cuyo principal objetivo era el de regular el reconocimiento oficial de estas entidades para que tuvieran acceso a las ayudas y servicios prestados por el Gobierno catalán.
En la última reunión del Consejo Comunidades Catalanas del Exterior, que Josep Lluís Carod-Rovira presidió hace unas semanas en el Palau Centelles de Barcelona, el vicepresidente catalán anunció la reforma de la ley y expresó su deseo de que dicha reforma se apruebe por consenso antes de que finalice este año. “Se trata de adaptar la ley (18/96) a las circunstancias actuales, que son muy distintas a las que existían cuando fue aprobada” en 1996 y posteriormente desarrollada mediante un decreto del año 1998, explicó Carod.
Más subvenciones
La nueva ley servirá también para incrementar el apoyo de la Generalitat a los “casals” catalanes en el exterior, un incremento que, ya ha empezado a producirse porque en los dos últimos presupuestos de los gobiernos tripartitos han aumentado sustancialmente las subvenciones a estas entidades, hasta llegar a los 2,5 millones del ejercicio de 2006, que presumiblemente se repetirán en 2007, dado que el Govern tiene el presupuesto prorrogado por la convocatoria de elecciones autonómicas en noviembre. Con estos recursos adicionales, las comunidades catalanas en el exterior disponen, por ejemplo, de más becas de estudios, más y mejor acceso a las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), además de acceso a dominios de Internet “.cat”, a la Administración Electrónica de la Generalitat y a los canales de televisión en lengua catalana.
Además, las CCE han recibido apoyo para la rehabilitación de las sedes de los “casals” en Buenos Aires (Argentina) y La Habana (Cuba), además de anunciar la publicación de la primera “Historia de Cataluña en el exterior”.
Carod explicó, en este sentido, que “emigración catalana” a otros países ya no tiene lugar mayoritariamente por motivaciones políticas o de situación económica sino, sobre todo, por “motivos de movilidad profesional” a fin de ejercer determinadas profesiones técnicas o científicas. El vicepresidente catalán destacó además el esfuerzo realizado por la Generalitat para “recuperar la memoria histórica de la Cataluña exterior”.