En el texto, los municipios reconocieron los “momentos de enorme dificultad económica” que atraviesan, pero recalcaron que su mala situación financiera es por “un sistema de financiación obsoleto e insuficiente”, que piden revisar; la caída en la recaudación derivada del parón en la construcción, y la asunción de “competencias que no son propias”.
Además, el manifiesto aprobado por la federación de entes locales apunta que los mismos están prestando “cerca del 25% de los servicios públicos”, mientras manejan “el 11% de los recursos”.
Precisamente, los 315 ayuntamientos gallegos ya empezaron a recibir los anticipos correspondientes a las ayudas destinadas a financiar los servicios sociales comunitarios, que ascienden a unos 12,4 millones de euros para toda Galicia y suponen que las entidades locales están recibiendo parte de la financiación cinco meses antes que el año anterior.
Los conceptos financiados son los adelantos de los conceptos del servicio de ayuda en el hogar (básico para ayuntamientos de más de 20.000 habitantes); a la subvención para el mantenimiento de los trabajadores sociales de todos los ayuntamientos, así como para el personal técnico de estos servicios en los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes. Y también se ejecutó el primer pago correspondiente al Servicio de ayuda en el hogar de dependencia.
Además, la Xunta creó la primera Comisión de Análisis Local para encontrar fórmulas que ofrezcan a los ayuntamientos “mecanismos de cooperación y propuestas de gestión para hacer viables los servicios públicos municipales”.