La Federación de Sociedades Gallegas conmemora en Buenos Aires el 57 aniversario de la muerte de Castelao

Francisco Lores realizó una ofrenda floral ante el busto de la insigne figura del galleguismo

La ceremonia se llevó a cabo en la plazoleta donde se encuentra el busto del insigne gallego, situada en Independencia y Bernardo de Irigoyen, de la capital argentina; ciudad en la que residiera hasta su muerte ésta emblemática figura de la galleguidad.
En el lugar se concentraron numerosos integrantes de la colectividad gallega.
Hacia las 19 horas, acompañado por gaiteros y abanderados portando las banderas de Galicia, Argentina y la tricolor adoptada por decreto del 27 de abril de 1931 del Gobierno provisional de la Segunda República española, enseñas del Bloque Nacionalista Gallego y el estandarte de la Federación de Sociedades Gallegas, se hizo presente el presidente de la misma, Francisco &#145Paco&#146 Lores Mascato, quien realizó una ofrenda floral ante el busto de Castelao.
Al dirigirse al público presente -en lengua gallega- Lores expresó su voluntad desde hace varios años de realizar éste homenaje en forma conjunta con toda la colectividad. Explicó también la ausencia de la bandera española considerando, sin que se trate de una cuestión de índole personal, que la bandera cuya presencia corresponde es la republicana, por haber tomado parte Castelao por la República durante la guerra civil. Se refirió también a la personalidad del homenajeado, a quien definió como galleguista, trazando una breve reseña de su trayectoria política a lo largo de los años.
Paco Lores, natural de O Grove (Pontevedra) llegó como emigrante a Buenos Aires en el buque &#145Entre Ríos&#146 el 1 de agosto de 1952. En el plano laboral, llegó a desarrollar una empresa metalúrgica en el Gran Buenos Aires, donde formó su familia; teniendo, además, vasta y destacada trayectoria en la colectividad gallega de Buenos Aires.
Posteriormente, presentó a la cantante Lorena Lores quien, a capella, brindó su versión de &#145Lela&#146, canción compuesta por Castelao para su obra Os vellos no deben namorarse y también &#145Alecríns&#146, cantiga popular gallega, que fue coreada por parte del público presente.
Además, gaiteros y tamborileros ofrecieron pasodoble, muñeira y jota, para deleite de los allí presentes que, incluso salieron a bailar al son de éstos ritmos.


Datos biográficos

Castelao nació en Cabo de Vila, municipio de Rianxo (A Coruña), el 30 de enero de 1886. Cursó en Rianxo sus estudios primarios y, reclamado por su padre -emigrado en Argentina-, marchó a la provincia de La Pampa -entonces territorio nacional-, en 1896, permaneciendo allí, hasta que en 1900 regresó a Galicia con su madre y hermanos, donde algunos años más tarde volvería su padre.
Licenciado en Medicina, en 1909, comenzó a publicar sus primeras caricaturas en Vida Gallega y El cuento semanal.
La influencia de su padre lo llevó a militar en las filas del conservadurismo gallego. En 1910 volvió a Rianxo, dispuesto a ejercer como médico rural, participando en la creación de El barbero municipal, semanario en el que tuvo destacado protagonismo; contrayendo matrimonio en 1912, con doña Virginia Pereira.
Poco a poco se fue alejando de la medicina, y comenzó a colaborar en algunos semanarios de la Galicia peregrina, como La voz de Galicia, de Buenos Aires. De entonces, son sus primeros galardones nacionales y sus colaboraciones en &#145La Esfera&#146, &#145A nosa terra&#146, y &#145El sol&#146. En su obra literaria, que se caracteriza por su tono realista y popular, destacan &#145Os dous de sempre&#146 (novela, 1934); &#145Retrincos&#146 (narraciones breves, 1934); &#145Os vellos no deben namorarse&#146 (comedia con escenografía propia, escrita en 1941, publicada en 1953); &#145Sempre en Galiza&#146, editada por el desaparecido Centro Orensano, de Buenos Aires
El final de la contienda decidió definitivamente su exilio. En el año 1940 partió hacia Argentina, recibiendo el cálido homenaje de sus paisanos en la escala de Montevideo.
Entre los años 1940 y 1945 residió en Buenos Aires, con algunos intervalos en México, Montevideo y París. En 1945, volvió a Cuba, tras una reunión de las Cortes de la República, celebrada en México.
Falleció el 7 de enero de 1950, en el sanatorio del Centro Gallego de Buenos Aires.
Sus restos permanecieron en el Panteón del Centro Gallego, del porteño cementerio de la Chacarita, hasta que en 1984 fueron trasladados a Galicia autonómica, donde descansan desde el 26 de junio de ese año, en el Panteón de Gallegos Ilustres de Santiago.