“La fe por la Blanca Paloma no tiene límites”

Luego de celebrarse una misa en la catedral -venerando la imagen de la Blanca Paloma con cante y baile a cargo del Grupo Azahares-, la comunidad andaluza se reunió en los espacios de la Sociedad Española para celebrar con un almuerzo la fe que se ha transmitido de generación en generación, inundando nuevos corazones que hacen compañía a las autoridades de la Casa de Andalucía de San Nicolás  y a toda su comunidad.
Santiago Blanco, quien elaboró la imagen de la Virgen que se venera en San Nicolás, explica que “lo rociero viene del alma” y que esta es la razón por la cual es cada vez más nutrida la convocatoria de esta procesión. “La fe por la Blanca Paloma no tiene límites”, dice Santiago con una sonrisa plena en su rostro, justo en una de las esquinas que se detiene la procesión para cantar y bailar a la virgen.
De Pérez, de Cañada de Gómez y otras localidades aledañas a San Nicolás llegaron peregrinos llamados por la fe, por la alegría y por lo colorido de estas festividades organizadas por la Casa de Andalucía de San Nicolás, presidida por Maruja Viejo López.
“Mucho del éxito de estas fiestas se debe al trabajo arduo de Carina Nimitan, directora del grupo Azahares desde su fundación en 2007. Ellos son los que ponen la música y el baile que tanto atraen a andaluces y locales”, comentó Maruja antes de dar la bienvenida al evento central de las celebraciones.