La marcha había sido convocada por un grupo de personas vinculadas al deporte del remo, por la regata de traineras de La Concha de San Sebastián. Sin embargo, el departamento que dirige Rodolfo Ares no autorizó la manifestación, por lo que los promotores la anularon. Pese a ello, unas doscientas personas intentaron congregarse sobre las 14 horas en el Boulevard de la capital guipuzcoana, donde se tropezaron con un fuerte dispositivo de la Policía Autonómica vasca, que impidió la manifestación sin demasiados problemas. Después, los agentes retiraron algunas pancartas instaladas en varias calles del casco viejo.
Una semana antes, ocho personas fueron detenidas de madrugada en Lequeitio (Vizcaya) en enfrentamientos con la Policía Autónoma, en los que se produjeron siete heridos, entre ellos un agente de la Ertzaintza. Durante aproximadamente cinco horas, el municipio registró hasta ocho incendios.
Por otro lado, el juez Baltasar Garzón procesó por integración o colaboración con ETA a 13 miembros de Askatasuna y Demokrazia 3 Milioi (D3M), que tienen suspendidas sus actividades y cuyas candidaturas anuló primero el Tribunal Supremo y luego el Constitucional para las pasadas elecciones vascas del 1 de marzo. El magistrado de la Audiencia Nacional ha dejado fuera a otros doce integrantes de estas formaciones porque considera que para diez de ellos no hay indicios suficientes y los dos restantes están imputados en causas similares.